SRI
NRSIMHADEVA
MULTIPLY
SRI NRSIMHADEVA - MULTIPLY
Creado por juancas del 28 de Diciembre del 2012
117JC - arjuna8
para Todos
Arjuna protector:
TEXTO 41
k-iÀtv& b]aø<a& bal&/ Gaa& v*Ö& raeiGa<a& iñYaMa( )
Xar<aaePaSa*Ta& Satv& NaaTYaa+aq" Xar<aPa[d" )) 41 ))
kaccit tvaṁ brāhmaṇaṁ bālaṁ
gāṁ vṛddhaṁ rogiṇaṁ striyam
śaraṇopasṛtaṁ sattvaṁ
nātyākṣīḥ śaraṇa-pradaḥ
kaccit—si; tvam—tú mismo; brāhmaṇam—los brāhmaṇas; bālam—el niño; gām—la vaca; vṛddham—anciano; rogiṇam—los enfermos; striyam—la mujer; śaraṇa-upasṛtam—habiendo acudido en busca de protección; sattvam—cualquier ser viviente; na—si; atyākṣīḥ—no darle refugio; śaraṇa-pradaḥ—que merece protección.
TRADUCCIÓN
Tú siempre eres el protector de los seres vivientes que lo merecen, tales como los brāhmaṇas, los niños, las vacas, las mujeres y los enfermos. ¿Sería que no les pudiste brindar protección cuando acudieron a ti en busca de refugio?
SIGNIFICADO
Los brāhmaṇas, quienes siempre están dedicados a la búsqueda del conocimiento por el bien de la sociedad, tanto en el sentido material como espiritual, merecen la protección del rey en todos los aspectos. Así mismo, los niños del Estado, la vaca, la persona enferma, la mujer y el anciano, requieren específicamente de la protección del Estado o de un rey kṣatriya. Si el kṣatriya, o la orden real, o el Estado, no les brinda protección a esos seres vivientes, es sin duda vergonzoso para el kṣatriya o para el Estado. Si cosas como éstas de hecho le habían ocurrido a Arjuna, Mahārāja Yudhiṣṭhira estaba ansioso de enterarse de las discrepancias. (S.B. 1º, Cap. 14, V. 41, págs. 719-720).
Arjuna protege a Indra/ Arjuna protege a los semidioses:
TEXTO 13
Ta}aEv Mae ivhrTaae >auJad<@YauGMa&
Gaa<@qvl/+a<aMaraiTavDaaYa deva" )
SaeNd]a" ié[Taa YadNau>aaivTaMaaJaMaq!
TaeNaahMaÛ MauizTa" Pauåze<a >aUMana )) 13 ))
tatraiva me viharato bhuja-daṇḍa-yugmaṁ
gāṇḍīva-lakṣaṇam arāti-vadhāya devāḥ
sendrāḥ śritā yad-anubhāvitam ājamīḍha
tenāham adya muṣitaḥ puruṣeṇa bhūmnā
tatra—en ese planeta celestial; eva—ciertamente; me—yo mismo; viharataḥ—mientras estaba de huésped; bhuja-daṇḍa-yugmam—mis dos brazos; gāṇḍīva—el arco llamado Gāṇḍīva; lakṣaṇam—marca; arāti—un demonio de nombre Nivātakavaca; vadhāya—para matar; devāḥ—todos los semidioses; sa—junto con; indrāḥ—Indra, el rey celestial; śritāḥ—refugiándose en; yat—por cuyo; anubhāvitam—hizo que fuera posible ser poderoso; ājamīḍha—¡oh, descendiente del rey Ajamīḍha; tena—por Él; aham—yo mismo; adya—actualmente; muṣitaḥ—desprovisto de; puruṣeṇa—la personalidad; bhūmnā—suprema.
TRADUCCIÓN
Cuando me quedé de huésped en los planetas celestiales por unos días, todos los semidioses celestiales, incluso el rey Indradeva, con el fin de matar al demonio de nombre Nivātakavaca, se refugiaron en mis brazos, que estaban marcados con el arco Gāṇḍiva. ¡Oh, Rey, descendiente de Ājamīḍa!, actualmente estoy privado de la Suprema Personalidad de Dios, por cuya influencia yo era así de poderoso.
SIGNIFICADO
Los semidioses celestiales son sin duda más inteligentes, poderosos y hermosos, y aún así tuvieron que pedirle ayuda a Arjuna debido a su arco Gāṇḍiva, que estaba apoderado por la gracia del Señor Śrī Kṛṣṇa. El Señor es todopoderoso, y por Su gracia Su devoto puro puede ser tan poderoso como Él lo desee, y ello no tiene límites. Y cuando el Señor le retira a alguien Su poder, la persona en cuestión se vuelve impotente por la voluntad del Señor. (S.B. 1º, Cap. 15, V. 13, pág. 740).
Arjuna protegido por Kṛṣṇa:
TEXTO 37
SviNaGaMaMaPahaYa MaTPa[iTaja‚
Ma*TaMaiDak-TauRMavPlu/Taae rQaSQa" )
Da*TarQacr<aae_>YaYaaÀl/d(Gau‚
hRirirv hNTauiMa>a& GaTaaetarqYa" )) 37 ))
sva-nigamam apahāya mat-pratijñām
ṛtam adhikartum avapluto rathasthaḥ
dhṛta-ratha-caraṇo ’bhyayāc caladgur
harir iva hantum ibhaṁ gatottarīyaḥ
sva-nigamam—su propia veracidad; apahāya—para anular; mat-pratijñām—mi propia promesa; ṛtam—verdadera; adhi— más; kartum—para hacerlo; avaplutaḥ—bajándose; ratha-sthaḥ—de la cuadriga; dhṛta—tomando; ratha—cuadriga; caraṇaḥ—rueda; abhyayāt—fue presuradamente; caladguḥ—hollando la tierra; hariḥ—león; iva—como; hantum—para matar; ibham—elefante; gata—dejando de lado; uttarīyaḥ—tela para cubrirse.
TRADUCCIÓN
Cumpliendo mi deseo y sacrificando Su propia promesa, se bajó de la cuadriga, tomó la rueda de ésta, y corrió apresuradamente hacia mí, tal como un león que va a matar a un elefante. En el camino, incluso dejó caer Su manto.
SIGNIFICADO
La Batalla de Kurukṣetra se libró en base a principios militares, pero al mismo tiempo con un espíritu deportivo, como una pelea entre amigos. Duryodhana criticó a Bhīṣmadeva, alegando que por afecto parternal este último se mostraba reacio a matar a Arjuna. Un kṣatriya no puede tolerar insultos en relación con el principio de pelear. Bhīṣmadeva prometió por ello que al día siguiente mataría a todos los cinco Pāṇḍavas con armas especiales hechas con ese fin. Duryodhana quedó satisfecho, y guardó consigo las flechas que había que entregar al día siguiente durante la pelea. Mediante trucos, Arjuna le quitó las flechas a Duryodhana, y Bhīṣmadeva pudo darse cuenta de que se trataba de un ardid del Señor Kṛṣṇa. En consecuencia, hizo el voto de que al día siguiente Kṛṣṇa tendría que tomar las armas personalmente, pues, de no hacerlo, Su amigo Arjuna moriría. En la pelea del siguiente día, Bhīṣmadeva luchó con una violencia tal, que tanto Arjuna como Kṛṣṇa se vieron en dificultades. Arjuna ya casi estaba vencido; la situación se puso muy tensa, pues Bhīṣmadeva ya estaba a punto de matarlo. El Señor Kṛṣṇa quiso entonces complacer a Su devoto, Bhīṣma, haciendo que se mantuviera la promesa de este último, que era más importante que la Suya propia. Aparentemente, Él rompió Su propia promesa. Él prometió antes del comienzo de la Batalla de Kurukṣetra que permanecería sin armas y que no emplearía Su fuerza a favor de ninguno de los bandos. Pero para proteger a Arjuna se bajó de la cuadriga, tomó la rueda de la misma, y corrió rápidamente hacia Bhīṣmadeva con una actitud furiosa, tal como un león que va a matar a un elefante. En el camino, dejó caer la tela con la que se cubría, y, por la gran ira que exhibía, no se dio cuenta de que se le había caído. Bhīṣmadeva soltó de inmediato sus armas y se dispuso a ser matado por Kṛṣṇa, su amado Señor. Pero la pelea del día terminó en ese preciso momento, y Arjuna se salvó. Desde luego que no había posibilidad alguna de que Arjuna muriera, porque el propio Señor estaba en la cuadriga, pero debido a que Bhīṣmadeva quería ver que el Señor Kṛṣṇa tomara algún arma para salvar a Su amigo, el Señor creó esta situación, haciendo que la muerte de Arjuna pareciera inminente. Él se quedó ante Bhīṣmadeva para hacerle ver que su promesa se había cumplido y que Él había tomado la rueda. (S.B. 1º, Cap. 9, V. 37, págs. 459-460).
Arjuna puesto a prueba por Kṛṣṇa:
TEXTO 40
SaUTa ovac
Wv& Parq+aTaa DaMa| PaaQaR" k*-Z<aeNa caeidTa" )
NaEC^ÖNTau& GauåSauTa& YaÛPYaaTMahNa& MahaNa( )) 40 ))
sūta uvāca
evaṁ parīkṣatā dharmaṁ
pārthaḥ kṛṣṇena coditaḥ
naicchad dhantuṁ guru-sutaṁ
yadyapy ātma-hanaṁ mahān
sūtaḥ—Sūta Gosvāmī; uvāca—dijo; evam—esto; parīkṣatā—siendo examinado; dharmam—en lo referente al deber; pārthaḥ—Śrī Arjuna; kṛṣṇena—por el Señor Kṛṣṇa; coditaḥ—siendo alentado; na aicchat—no le gustó; hantum—matar; guru-sutam—el hijo de su maestro; yadyapi—aunque; ātma-hanam—asesino de hijos; mahān—muy grande.
TRADUCCIÓN
Sūta Gosvāmī dijo: A pesar de que Kṛṣṇa, quien estaba examinando a Arjuna en religión, alentó a este último a matar al hijo de Droṇācārya, a Arjuna, una gran alma, no le gustó la idea de matarlo, pese a que Aśvatthāmā era el monstruoso asesino de los miembros de la familia de Arjuna.
SIGNIFICADO
Arjuna era indudablemente una gran alma, lo cual también se comprueba aquí. El Señor lo anima aquí personalmente a matar al hijo de Droṇa, pero Arjuna considera que el hijo de su gran maestro debía ser perdonado, pues resulta ser el hijo de Droṇācārya, aun a pesar de ser un hijo indigno, habiendo realizado toda clase de nefandos actos, caprichosamente y para beneficio de nadie.
El Señor Śrī Kṛṣṇa alentó a Arjuna externamente, sólo para probar el sentido del deber de Arjuna. No ha de creerse que Arjuna estuviera incompleto en el sentido de su deber, ni que el Señor Śrī Kṛṣṇa desconociera el sentido del deber de Arjuna. Pero el Señor Śrī Kṛṣṇa puso a prueba a muchos de Sus devotos puros, únicamente para aumentar el sentido del deber. A las gopīs también se les hizo pruebas de esa clase. Y a Prahlāda Mahārāja también se le hizo una prueba semejante. Todos los devotos puros pasan con éxito las respectivas pruebas que les pone el Señor. (S.B. 1º, Cap. 7, V. 40, pág. 337).
TEXTO 41
AQaaePaeTYa SviXaibr& GaaeivNdiPa[YaSaariQa" )
NYavedYata& iPa[YaaYaE XaaecNTYaa AaTMaJaaNa( hTaaNa( )) 41 ))
athopetya sva-śibiraṁ
govinda-priya-sārathiḥ
nyavedayat taṁ priyāyai
śocantyā ātma-jān hatān
atha—después de eso; upetya—habiendo llegado; sva—propio; śibiram—campo; govinda—aquel que anima los sentidos (el Señor Śrī Kṛṣṇa); priya—querido; sārathiḥ—el auriga; nyavedayat—confió a; tam—él; priyāyai—al querido; śocantyai—lamentándose por; ātma-jān—sus propios hijos; hatān—asesinados.
TRADUCCIÓN
Después de llegar a su propio campamento, Arjuna, junto con su querido amigo y auriga (Śrī Kṛṣṇa), le confió el asesino a su amada esposa, la cual se estaba lamentando por sus hijos asesinados.
SIGNIFICADO
La relación trascendental que hay entre Arjuna y Kṛṣṇa es la de una amistad de lo más entrañable. En El Bhagavad-gītā, el propio Señor ha dicho que Arjuna es Su muy querido amigo. Cada ser viviente está igualmente relacionado con el Señor Supremo mediante alguna clase de relación afectuosa, bien sea como sirviente, como amigo, como pariente, o como un objeto de amor conyugal. Todo el mundo puede disfrutar, pues, de la compañía del Señor en el reino espiritual, si de alguna manera lo desea y tatra sinceramente de lograrlo mediante el proceso de bhakti-yoga. (S.B. 1º, Cap. 7, V. 41, pág. 338).
Arjuna recibe a Draupadī como recompensa:
TEXTO 7
YaTSa&é[Yaad( d]uPadGaehMauPaaGaTaaNaa&
raja& SvYa&vrMau%e SMarduMaRdaNaaMa( )
TaeJaae ôTa& %lu/ MaYaai>ahTaê MaTSYa"
SaÂqk*-TaeNa DaNauzaiDaGaTaa c k*-Z<aa )) 7 ))
yat-saṁśrayād drupada-geham upāgatānāṁ
rājñāṁ svayaṁvara-mukhe smara-durmadānām
tejo hṛtaṁ khalu mayābhihataś ca matsyaḥ
sajjīkṛtena dhanuṣādhigatā ca kṛṣṇā
yat—por cuya misericordia; saṁśrayāt—por la fuerza; drupada-geham—en el palacio del rey Drupada; upāgatānām—todos los reunidos; rājñām—de los príncipes; svayaṁvara-mukhe—en la ocasión de la selección del novio; smara-durmadānām—todos los pensamientos lujurioso; tejaḥ—poder; hṛtam—venció; khalu—como era; mayā—por mí; abhihataḥ—atravesado; ca—también; matsyaḥ—el pez que servía de blanco; sajjī-kṛtena—equipando el arco; dhanuṣā—también mediante ese arco; adhigatā—gané; ca—también; kṛṣṇā—Draupadī.
TRADUCCIÓN
Únicamente gracias a Su misericordiosa fuerza fui capaz de vencer a todos los lujuriosos príncipes que se reunieron en el palacio del rey Drupada para la selección del novio. Con mi arco y flecha pude atravesar el pez que servía de blanco, y con ello gané la mano de Draupadī.
SIGNIFICADO
Draupadī era la muy hermosa hija del rey Drupada, y cuando joven, casi todos los príncipes deseaban su mano. Pero Drupada Mahārāja decidió entregarle su hija únicamente a Arjuna, y con ese fin ingenió una manera peculiar de hacerlo. Había un pez que colgaba del techo interior de la casa, protegido por una rueda. La condición era que un miembro de la orden de los príncipes debía ser capaz de atravesar los ojos del pez a través de la rueda protectora, y esto sin mirar al blanco directamente. En el suelo había una vasija con agua en la que se reflejaban el blanco y la rueda, y uno tenía que apuntar el blanco mirándolo en la temblorosa agua de la vasija. Mahārāja Drupada sabía bien que únicamente Arjuna, o en su lugar, Karṇa, podían ejecutar con éxito el plan. Pero aún así quería entregarle su hija a Arjuna. Y en la asamblea de la orden de los príncipes, cuando Dhṛṣṭadyumna, el hermano de Draupadī, le presentó todos los príncipes a su hermana ya adulta, Karṇa también estaba presente en el juego. Pero Draupadī evitó con mucho tacto que Karṇa fuera rival de Arjuna, para lo cual expresó por intermedio de su hermano Dhṛṣṭadyumna sus deseos de no querer aceptar a nadie que fuera menos que kṣatriya. Los vaiśyas y los śūdras son menos importantes que los kṣatriyas. Karṇa era conocido como el hijo de un carpintero, un śūdra. Así que Draupadī eludió a Karṇa con esa excusa. Cuando Arjuna, vestido de brāhmaṇa pobre, atravesó el difícil blanco, todo el mundo se asombró, y todos ellos, especialmente Karṇa, le ofrecieron a Arjuna una reñida pelea, pero, como de costumbre, por la gracia del Señor Kṛṣṇa, Arjuna fue capaz de salir con mucho éxito de la pelea con los príncipes, y, de ese modo, ganarse la valiosa mano de Kṛṣṇā, o Draupadī. Arjuna se estaba lamentando al recordar el incidente en ausencia del Señor, por cuya fuerza, exclusivamente, él había sido así de poderoso. (S.B. 1º, Cap. 15, V. 7, págs. 729-731).
TEXTO 16
YaÕae"zu Maa Pa[i<aihTa& Gauå>aqZMak-<aR‚
Naá*i}aGaTaRXaLYaSaENDavbaiúk-aÛE" )
Aña<YaMaaegaMaihMaaiNa iNaæiPaTaaiNa
NaaePaSPa*éuNa*RhirdaSaiMavaSaurai<a )) 16 ))
yad-doḥṣu mā praṇihitaṁ guru-bhīṣma-karṇa-
naptṛ-trigarta-śalya-saindhava-bāhlikādyaiḥ
astrāṇy amogha-mahimāni nirūpitāni
nopaspṛśur nṛhari-dāsam ivāsurāṇi
yat—bajo cuya; doḥṣu—protección de los brazos; mā praṇihitam—encontrándome situado; guru—Droṇācārya; bhīṣma—Bhīṣma; karṇa—Karṇa; naptṛ—Bhūriśravā; trigarta—el rey Suśarmā; śalya—Śalya; saindhava—el rey Jayadratha; bāhlika—hermano de Mahārāja Śāntanu (el padre Bhīṣma); ādyaiḥ—ect.; astrāṇi—armas; amogha—invencible; mahimāni—muy poderosos; nirūpitāni—aplicaron; na—no; upaspṛśuḥ—tocaron; nṛhari-dāsam—el servidor de Nṛsiṁhadeva (Prahlāda); iva—como; asurāṇi—armas empleadas por los demonios.
TRADUCCIÓN
Grandes generales tales como Bhīsma, Droṇa, Karṇa, Bhūriśravā, Suśarmā, Śalya, Jayadratha y Bāhlika, dirigieron todos contra mí sus armas invencibles. Pero en virtud de Su gracia (del Señor Kṛṣṇa), no pudieron ni siquiera tocarme un cabello. Así mismo, Prahlāda Mahārāja, el supremo devoto del Señor Nṛsiṁhadeva, no fue afectado por las armas que los demonios emplearon contra él.
SIGNIFICADO
La historia de Prahlāda Mahārāja, el devoto de Nṛsiṁhadeva, se narra en el Séptimo Canto de El Śrīmad-Bhāgavatam. Prahlāda Mahārāja, un niñito de sólo cinco años, se volvió el objeto de la envidia de su padre, Hiraṇyakaśipu, únicamente por haberse convertido en devoto puro del Señor. El demonio padre empleó todas sus armas para matar al hijo devoto, Prahlāda, pero por la gracia del Señor, el niño se salvó de toda clase de acciones peligrosas que realizó su padre. Él fue lanzado a un fuego, al seno de un aceite hirviendo, desde la cima de una colina, bajo las patas de un elefante, y se le administró veneno. Por último, el propio padre tomó una cuchilla para matar a su hijo, por lo cual Nṛsiṁhadeva apareció y, en presencia del hijo, mató al atroz padre. Así pues, nadie puede matar al devoto del Señor. De la misma manera, Arjuna también fue salvado por el Señor, aunque grandes oponentes, tales como Bhīṣma, emplearon contra él toda clase de armas peligrosas.
Karṇa: Engendrado en Kuntī por el dios del Sol antes de que ella se casara con Mahārāja Pāṇḍu, Karṇa nació con ajorcas y aretes, signos extraordinarios que designan a un héroe intrépido. Al principio se llamaba Vasusena, pero cuando creció le regaló a Indradeva sus ajorcas y aretes naturales, y de ahí en adelante llegó a ser conocido como Vaikartana. Después de que la doncella Kuntī lo dio a luz, fue lanzado al Ganges. Luego fue recogido por Adhiratha, y él y su esposa Rādhā lo criaron como si fuera su propio hijo. Karṇa era muy caritativo, especialmente con los brāhmaṇas. No había nada de lo que no pudiera privarse por un brāhmaṇa. Con el mismo espíritu caritativo le dio a Indradeva como caridad sus ajorcas y aretes naturales, y éste último, quedando muy satisfecho con él, le dio a cambio una gran arma, denominada Śakti. Él fue aceptado como uno de los alumnos de Droṇācārya, y desde el mismo comienzo hubo cierta rivalidad entre él y Arjuna. Al ver su constante rivalidad con Arjuna, Duryodhana lo escogió como compañero, y su amistad creció gradualmente y se volvió muy íntima. El también estuvo presente en la gran asamblea de la función svayaṁvara de Draupadī, y cuando trató de exhibir su talento en esa reunión, el hermano de Draupadī declaró que Karṇa no podía participar en la competencia, por su condición de ser el hijo de un carpintero śūdra. Aunque fue rechazado de la competencia, aun así, cuando Arjuna atravesó con éxito el pez que servía de blanco en el techo y Draupadī le puso a Arjuna su guirnalda, Karṇa y los demás príncipes desilusionados le presentaron a Arjuna un obstáculo poco común, mientras se iba con Draupadī. Karṇa, especialmente, peleó con él de un modo muy valeroso, pero todos ellos fueron derrotados por Arjuna. Duryodhana estaba muy complacido con Karṇa por la constante rivalidad que había entre él y Arjuna, y cuando subió al poder, puso a Karṇa en el trono del Estado de Aṅga. Frustrado en su intento de ganarse a Draupadī, Karṇa le aconsejó a Duryodhana que atacara al rey Drupada, ya que después de derrotarlo, se iba a poder arrestar tanto a Arjuna como a Draupadī. Pero Droṇācārya los regaño por esa conspiración, y ellos se abstuvieron de llevarla a cabo. Karṇa fue vencido muchas veces, no sólo por Arjuna, sino también por Bhīmasena. Él era soberano del reino de Bengala, Orissa y Madrás juntos. Más adelante, tomó parte activa en el sacrificio Rājasūya de Mahārāja Yudhiṣṭhira, y cuando hubo una apuesta entre los hermanos rivales, apuesta planeada por Śakuni, Karṇa participó en ella, y se sintió muy complacido cuando se puso en juego a Draupadī. Esto avivó su vieja rencilla. Cuando Draupadī estaba en juego, lo anunció con mucho entusiasmo, y fue él quien le ordenó a Duḥśāsana que les quitara la ropa tanto a los Pāṇḍavas como a Draupadī. Él le pidió a Draupadī que eligiera otro esposo, porque, habiéndola perdido los Pāṇḍavas, se había convertido en esclava de los Kurus. Siempre fue un enemigo de los Pāṇḍavas, y cuando quiera que se presentaba la oportunidad, trataba de reprimirlos por todos los medios. Durante la Batalla de Kurukṣetra previó el resultado final, y expresó su opinión de que como el Señor Kṛṣṇa era el auriga de Arjuna, éste ganara la batalla. Siempre discrepó con Bhīṣma, y a veces se mostraba tan orgulloso como para decir que podía acabar con los Pāṇḍavas en cinco das, si Bhīṣma no interfería en sus planes. Pero se mortificó mucho cuando Bhīṣma murió. Él mató a Ghatotkacha con el arma Sakti que Indradeva le dio. Su hijo, Vṛṣasena, fue matado por Arjuna. Él mató al mayor número de soldados Pāṇḍavas. Al final tuvo una severa contienda con Arjuna, y fue sólo él quien pudo tumbarle a éste el yelmo. Pero ocurrió que una rueda de su cuadriga se atascó en el lodo del campo de batalla, y cuando se bajó para arreglarla, Arjuna aprovechó la oportunidad y lo mató, aunque le había pedido a Arjuna que no lo hiciera.
Naptā o Bhūriśvarā: Bhūriśvarā era hijo de Somadatta, un miembro de la familia Kuru. Él era hermano de Śalya. Ambos hermanos asistieron con su padre a la ceremonia svayaṁvara de Draupadī. Todos ellos apreciaron la maravillosa fuerza que Arjuna tenía por ser el devoto amigo del Señor, y, en consecuencia, Bhūriśvarā les aconsejó a los hijos de Dhṛtarāṣṭra que no riñeran ni pelearan con ellos. Todos ellos también asistieron al Rājasūya-yajña de Mahārāja Yudhiṣṭhira. El poseía un regimiento akṣauhinī compuesto de ejército, caballería, elefantes y cuadrigas, y todos ellos fueron empleados en la Batalla de Kurukṣetra en favor del bando de Duryodhana. Fue contado por Bhīma como uno de los yūtha-patis. En la Batalla de Kurukṣetra peleó especialmente con Sātyaki, y mató a diez hijos de éste. Posteriormente, Arjuna le cortó las manos, y al final fue matado por Sātyaki. Al morir se fundió en la existencia de Viśvadeva.
Trigarta o Suśarmā: Hijo de Mahārāja Vṛddhakṣetra, era el rey de Trigartadeśa, y también estuvo presente en la ceremonia svayaṁvara de Draupadī. Era uno de los aliados de Duryodhana, y le aconsejó a éste atacar el Matsyadeśa (Darbhaṅga). Durante la época en que ocurrió el robo de las vacas en Virāṭanagara, pudo arrestar a Mahārāja Virāṭa, pero luego éste fue liberado por Bhīma. El la Batalla de Kurukṣetra también peleó con mucha valentía, pero al final fue matado por Arjuna.
Jayadratha (hijo de Mahārāja). Otro hijo de Mahārāja Vṛddhakṣetra. Era el rey de Sindhudeśa (el actual Pakistán Sind). Tenía una esposa de nombre Duḥśalā. El también estuvo presente en la ceremonia svayaṁvara de Draupadī, y deseaba muy intensamente obtener su mano, pero falló en la competencia. Sin embargo, desde entonces siempre buscó la oportunidad de ponerse en contacto con ella. Cuando iba a Sālyadesa a casarse, ocurrió que en el camino a Kāmyavana vio a Draupadī de nuevo, y se sintió demasiado atraído a ella. Los Pāṇḍavas y Draupadī estaban entonces en el exilio, después perdido su imperio en el juego, y Jayadratha consideró prudente enviarle un mensaje de un modo ilícito a través de Koṭiśaṣya, uno de sus asociados. Draupadī de inmediato rechazó con vehemencia la proposición de Jayadratha, pero como él estaba tan atraído por la belleza de ella, trató una y otra vez. En cada una de las oportunidades, Draupadī lo rechazó. Él trató de llevársela a la fuerza en su cuadriga, y al principio Draupadī le dio un buen empujón, y él cayó como un árbol cortado de raíz. Pero no se desanimó, y logró sentar a Draupadī a la fuerza en la cuadriga. Este incidente fue visto por Dhaumya Muni, quien se quejó enérgicamente de la acción de Jayadratha. El también siguió la cuadriga, y a través de Dhātreyikā el asunto fue llevado a la atención de Mahārāja Yudhiṣṭhira. Los Pāṇḍavas atacaron entonces a los soldados de Jayadratha y los mataron a todos, y por último Bhīma atrapó a Jarādratha y lo golpeó muy severamente, hasta casi matarlo. Luego, se le cortó todo el cabello, dejándole únicamente cinco pelos, y fue llevado ante todos los reyes y presentado como el esclavo de Mahārāja Yudhiṣṭhira. Él fue obligado a admitir que era el esclavo de Mahārāja Yudhiṣṭhira ante toda la orden de los príncipes, y fue llevado ante Mahārāja Yudhiṣṭhira en la misma condición. Mahārāja Yudhiṣṭhira tuvo la gran bondad de ordenar que lo liberaran, y cuando aceptó convertirse en un príncipe subordinado a Mahārāja Yudhiṣṭhira, la reina Draupadī también deseó su liberación. Después de este incidente, se le permitió regresar a su país. Insultado así, fue a Gaṅgātrī, que está en los Himālayas, y se sometió a un severo tipo de penitencia para complacer al Señor Śiva. Él pidió la bendición de poder derrotar a todos los Pāṇḍavas, al menos uno a la vez. Luego comenzó la Batalla de Kurukṣetra, y se puso de parte de Duryodhana. En la pelea del primer día se enfrentó con Mahārāja Drupada, luego con Virāṭa y después con Abhimanyu. Mientras Abhimanyu era matado, habiendo sido rodeado despiadadamente por siete grandes generales, los Pāṇḍavas fueron a ayudarlo, pero Jayadratha, por la misericordia del Señor Śiva, los rechazó con gran habilidad. Ante esto, Arjuna hizo el voto de matarlo, y al oír eso, Jayadratha quiso irse del campo de guerra, y les pidió permiso a los Kauravas para su cobarde acción. Pero no se le permitió hacerlo. Por el contrario, se lo obligó a pelear con Arjuna, y mientras la pelea se llevaba a cabo, el Señor Kṛṣṇa le recordó a Arjuna que Śiva le había dado a Jayadratha la bendición de que cualquiera que le hiciera caer la cabeza al suelo, moriría al instante. Por lo tanto, le aconsejo a Arjuna que tirara la cabeza de Jayadratha directamente al regazo del padre de éste, el cual estaba dedicado a hacer penitencias en el lugar de peregrinaje conocido como Samanta-pañcaka. En efecto, Arjuna así lo hizo. El padre de Jayadratha se sorprendió al ver en su regazo una cabeza cercenada, y de inmediato la tiró al suelo. Él murió instantáneamente, con la frente resquebrajada en siete pedazos. (S.B. 1º, Cap. 15, V. 16, págs. 743-746).
Arjuna recibe misericordia del Señor:
TEXTO 12
YataeJaSaaQa >aGavaNa( YauiDa éUl/Paai<a‚
ivRSMaaiPaTa" SaiGairJaae_ñMadaiàJa& Mae )
ANYae_iPa cahMaMauNaEv k-le/vre<a
Pa[aáae MaheNd]>avNae MahdaSaNaaDaRMa( )) 12 ))
yat-tejasātha bhagavān yudhi śūla-pāṇir
vismāpitaḥ sagirijo ’stram adān nijaṁ me
anye ’pi cāham amunaiva kalevareṇa
prāpto mahendra-bhavane mahad-āsanārdham
yat—por cuya; tejasā—por la influencia; atha—una vez; bhagavān—la personalidad de dios (el Señor Śiva); yudhi—en la batalla; śūla-pāṇiḥ—aquel que tiene un tridente en la mano; vismāpitaḥ—asombrado; sa-girijaḥ—junto con la hija de los montes Himalaya; astram—arma; adāt—otorgada; nijam—de su propiedad; me—a mí; anye api—otros igualmente; ca—y; aham—yo mismo; amunā—por esto; eva—categóricamente; kalevareṇa—por el cuerpo; prāptaḥ—obtenido; mahā-indra-bhavane—en la casa de Indradeva; mahat—gran; āsana-ardham—asiento semielevado.
TRADUCCIÓN
Fue sólo por Su influencia que en una pelea pude asombrar al Señor Śiva, la personalidad de dios, y a su esposa, la hija del monte Himālaya. Así pues, él (el Señor Śiva) se sintió complacido conmigo, y me otorgó su propia arma. Otros semidioses también me hicieron entrega de sus respectivas armas, y además pude ir a los planetas celestiales con este cuerpo actual, y se me ofreció un asiento semielevado.
SIGNIFICADO
Por la gracia de la Suprema Personalidad de Dios Śrī Kṛṣṇa, todos los semidioses, entre ellos el Señor Śiva, estaban complacidos con Arjuna. En esencia, lo que se quiere decir es que alguien que es favorecido por el Señor Śiva o cualquier otro semidiós, no es necesariamente favorecido por el Supremo Señor Kṛṣṇa. Rāvaṇa era indudablemente un devoto del Señor Śiva, pero no pudo ser salvado de la ira de la Suprema Personalidad de Dios, el Señor Rāmacandra. Y hay muchos ejemplos como ése en las historias de los Purāṇas. Pero he aquí un caso en el que podemos ver que el Señor Śiva se sintió complacido con Arjuna incluso en una pelea que tuvo con él. Los devotos del Señor Supremo saben como respetar a los semidioses, pero los devotos de los semidioses a veces creen neciamente que la Suprema Personalidad de Dios no es más grande que éstos. Debido a semejante concepción, uno se convierte en un ofensor, y al final se encuentra con el mismo fin que tuvieron Rāvaṇa y otros. Los casos descritos por Arjuna, de cosas que ocurrieron en el transcurso de su amistad con el Señor Śrī Kṛṣṇa, son instructivos para todos aquellos a quienes las lecciones los convencerán de que, con sólo complacer al Supremo Señor Śrī Kṛṣṇa, uno puede conseguir todos los favores que existen, mientras que los devotos o adoradores de los semidioses únicamente pueden obtener beneficios parciales, que también son perecederos, como los propios semidioses.
Otra cosa significativas de este verso es que, por la gracia del Señor Kṛṣṇa, Arjuna, pudo llegar al planeta celestial incluso con su mismo cuerpo, y fue honrado por Indradeva, el semidiós celestial, sentándose con él en un asiento semielevado. Uno puede llegar a los planetas celestiales en virtud de los actos piadosos que se recomiendan en los śāstras en la categoría de las actividades fruitivas. Y, como se declara en El Bhagavad-gītā (9.21), cuando las reacciones de esos actos piadosos se terminan, el que disfrutaba de ellos es de nuevo degradado y enviado a este planeta terrenal. La Luna también está en el mismo nivel que los planetas celestiales, y únicamente a las personas que sólo han realizado actos virtuosos - celebrando sacrificios, dando caridad y haciendo severas austeridades -, sólo a ellas puede permitírseles entrar en los planetas celestiales al terminarse el plazo de la vida del cuerpo. A Arjuna se le permitió entrar en los planetas celestiales con el mismo cuerpo simplemente por la gracia del Señor, pues, de lo contrario, eso no es posible. Los actuales esfuerzo de los científicos modernos para tratar de entrar en los planetas celestiales, sin duda que demostraran ser inútiles, porque estos científicos no están en el nivel de Arjuna. Ellos son seres humanos ordinarios, sin ningún recurso en la forma de sacrificios, caridad o austeridades. El cuerpo material es influido por las tres modalidades de la naturaleza material, es decir, la bondad, la pasión y la ignorancia. A la población actual la influyen más o menos las modalidades de la pasión y la ignorancia, y los signos de esa influencia se manifiestan en que la gente se vuelve muy lujuriosa y codiciosa. Estos degradados sujetos difícilmente pueden acercarse a los sistemas planetarios superiores. Por encima de los planetas celestiales, existen además muchos otros planetas, que sólo aquellos que están influidos por la bondad pueden alcanzar. En los planetas celestiales y otros planetas del universo, los habitantes son todos sumamente inteligentes, muchas más veces que los seres humanos, y todos ellos son piadosos y se hallan bajo la influencia de la bondad superior y de la bondad máxima. Todos ellos son devotos del Señor, y aunque su bondad no deja de estar adulterada, aun así se les conoce como semidioses que poseen buenas cualidades en la máxima cantidad posible dentro del mundo material. (S.B. 1º, Cap. 15, V. 12, págs. 738-739).
TEXTO 13
Ta}aEv Mae ivhrTaae >auJad<@YauGMa&
Gaa<@qvl/+a<aMaraiTavDaaYa deva" )
SaeNd]a" ié[Taa YadNau>aaivTaMaaJaMaq!
TaeNaahMaÛ MauizTa" Pauåze<a >aUMana )) 13 ))
tatraiva me viharato bhuja-daṇḍa-yugmaṁ
gāṇḍīva-lakṣaṇam arāti-vadhāya devāḥ
sendrāḥ śritā yad-anubhāvitam ājamīḍha
tenāham adya muṣitaḥ puruṣeṇa bhūmnā
tatra—en ese planeta celestial; eva—ciertamente; me—yo mismo; viharataḥ—mientras estaba de huésped; bhuja-daṇḍa-yugmam—mis dos brazos; gāṇḍīva—el arco llamado Gāṇḍīva; lakṣaṇam—marca; arāti—un demonio de nombre Nivātakavaca; vadhāya—para matar; devāḥ—todos los semidioses; sa—junto con; indrāḥ—Indra, el rey celestial; śritāḥ—refugiándose en; yat—por cuyo; anubhāvitam—hizo que fuera posible ser poderoso; ājamīḍha—¡oh, descendiente del rey Ajamīḍha; tena—por Él; aham—yo mismo; adya—actualmente; muṣitaḥ—desprovisto de; puruṣeṇa—la personalidad; bhūmnā—suprema.
TRADUCCIÓN
Cuando me quedé de huésped en los planetas celestiales por unos días, todos los semidioses celestiales, incluso el rey Indradeva, con el fin de matar al demonio de nombre Nivātakavaca, se refugiaron en mis brazos, que estaban marcados con el arco Gāṇḍiva. ¡Oh, Rey, descendiente de Ājamīḍa!, actualmente estoy privado de la Suprema Personalidad de Dios, por cuya influencia yo era así de poderoso.
SIGNIFICADO
Los semidioses celestiales son sin duda más inteligentes, poderosos y hermosos, y aún así tuvieron que pedirle ayuda a Arjuna debido a su arco Gāṇḍiva, que estaba apoderado por la gracia del Señor Śrī Kṛṣṇa. El Señor es todopoderoso, y por Su gracia Su devoto puro puede ser tan poderoso como Él lo desee, y ello no tiene límites. Y cuando el Señor le retira a alguien Su poder, la persona en cuestión se vuelve impotente por la voluntad del Señor. (S.B. 1º, Cap. 15, V. 13, pág. 740).
TEXTO 14
YaØaNDav" ku-åbl/aiBDaMaNaNTaPaar‚
Maek-ae rQaeNa TaTare_hMaTaqYaRSatvMa( )
Pa[TYaaôTa& bhu DaNa& c MaYaa Pareza&
TaeJaaSPad& Mai<aMaYa& c ôTa& iXarae>Ya" )) 14 ))
yad-bāndhavaḥ kuru-balābdhim ananta-pāram
eko rathena tatare ’ham atīrya-sattvam
pratyāhṛtaṁ bahu dhanaṁ ca mayā pareṣāṁ
tejās-padaṁ maṇimayaṁ ca hṛtaṁ śirobhyaḥ
yat-bāndhavaḥ—por cuya amistad únicamente; kuru-bala-abdhim—el océano del poder militar de los Kurus; ananta-pāram—el cual era insuperable; ekaḥ—solo; rathena—estando sentado en la cuadriga; tatare—ser capaz de cruzar; aham—yo mismo; atīrya—invencible; sattvam—existencia; pratyāhṛtam—retiré; bahu—inmensa cantidad; dhanam—riqueza; ca—también; mayā—por mí; pareṣām—del enemigo; tejāḥ-padam—fuente de brillo; maṇi-mayam—adornado con joyas; ca—también; hṛtam—llevado a la fuerza; śirobhyaḥ—de sus cabezas.
TRADUCCIÓN
El poder militar de los Kauravas era como un océano en el que moraban muchas existencias invencibles, y, debido a ello, era insuperable. Pero en virtud de Su amistad, yo, sentado en la cuadriga, pude cruzarlo. Y únicamente por Su gracia pude recobrar las vacas y también reunir a la fuerza muchos yelmos de reyes, los cuales estaban adornados con joyas que eran fuentes de gran brillo.
SIGNIFICADO
En el bando Kaurava había muchos comandantes determinados, tales como Bhīṣma, Droṇa, Krpa y Karṇa, y su poderío militar era tan insuperable como el gran océano. Y, no obstante, se debió a la gracia del Señor Kṛṣṇa que Arjuna solo, sentado en la cuadriga, pudo hacer de modo de derrotarlos uno tras otro sin dificultad. En el otro bando hubo muchos cambios de comandantes, pero del lado de los Pāṇḍavas, Arjuna, a solas en la cuadriga conducida por el Señor Kṛṣṇa, pudo hacerle frente a toda la responsabilidad de la gran guerra. De modo similar, cuando los Pāṇḍavas estaban viviendo de incógnito en el palacio de Virāṭa, los Kauravas tuvieron una riña con el rey Virāṭa, y decidieron quitarle su inmensa cantidad de vacas. Mientras lo estaban haciendo, Arjuna peleó con ellos de incógnito, y pudo recobrar las vacas junto con cierto botín tomado a la fuerza: las joyas engastadas en los turbantes de los miembros de la orden real. Arjuna recordó que todo eso había sido posible por la gracia del Señor. (S.B. 1º, Cap. 15, V. 14, págs. 740-741).
TEXTO 15
Yaae >aqZMak-<aRGauåXaLYacMaUZvd>a]‚
raJaNYavYaRrQaMa<@l/Mai<@TaaSau )
AGa]ecrae MaMa iv>aae rQaYaUQaPaaNaa‚
MaaYauMaRNaa&iSa c d*Xaa Sah AaeJa AaC^RTa( )) 15 ))
yo bhīṣma-karṇa-guru-śalya-camūṣv adabhra-
rājanya-varya-ratha-maṇḍala-maṇḍitāsu
agrecaro mama vibho ratha-yūthapānām
āyur manāṁsi ca dṛśā saha oja ārcchat
yaḥ—es Él únicamente; bhīṣma—Bhīṣma; karṇa—Karṇa; guru—Droṇācārya; śalya—Śalya; camūṣu—en medio de la falange militar; adabhra—inmenso; rājanya-varya—grandes príncipes de la realeza; ratha-maṇḍala—hilera de cuadrigas; maṇḍitāsu—adornado con; agre-caraḥ—yendo hacia adelante; mama—mío; vibho—¡oh, gran Rey!; ratha-yūtha-pānām—todos los aurigas; āyuḥ—duración de la vida o de las actividades fruitivas; manāṁsi—arrebatos mentales; ca—también; dṛśā—mediante la vista; sahaḥ—poder; ojaḥ—fuerza; ārcchat—retiro.
TRADUCCIÓN
Fue sólo Él quien les redujo a todos la duración de la vida, y quien, en el campo de batalla, le retiró el poder especulativo y la fuerza del entusiasmo a la gran falange militar integrada por los Kauravas, encabezados por Bhīṣma, Karṇa, Droṇa, Śalya, etc. La disposición de éstos era experta y más que suficiente, pero Él (el Señor Kṛṣṇa), mientras avanzaba, hizo todo eso.
SIGNIFICADO
La Absoluta Personalidad de Dios, el Señor Śrī Kṛṣṇa, se expande en el corazón de todos mediante Su porción Paramātmā plenaria, y, de ese modo, dirige a todo el mundo en lo referente al recuerdo, el olvido, el conocimiento, la falta de inteligencia, y en todas las actividades psicológicas (Bg. 15.15). En su carácter de Señor Supremo, Él puede aumentar o disminuir la duración de la vida de un ser viviente. Así pues, el Señor condujo la Batalla de Kurukṣetra según Su propio plan. Él quería esa batalla para establecer a Yudhiṣṭhira como el emperador de este planeta, y, para facilitar ese asunto trascendental, mató mediante Su voluntad omnipotente a todos los que se hallaban en el bando opuesto. El otro bando estaba equipado con todo el poderío militar y respaldado por grandes generales, tales como Bhīṣma, Droṇa y Śalya, y para Arjuna hubiera sido materialmente imposible ganar la batalla, si el Señor no lo hubiera ayudado mediante toda clase de tácticas. Esas tácticas las siguen por lo general todos los estadistas, incluso en la guerra moderna, pero todas ellas se realizan desde el punto de vista material, mediante poderosos espionajes, tácticas militares y maniobras diplomáticas. Sin embargo, como Arjuna era el devoto afectuoso del Señor, el Señor hizo todo eso Él mismo, sin que Arjuna tuviera que pasar por ninguna angustia personal. Ésa es la naturaleza del servicio devocional que se le presta al Señor. (S.B. 1º, Cap. 15, V. 15, págs. 741-742).
TEXTO 16
YaÕae"zu Maa Pa[i<aihTa& Gauå>aqZMak-<aR‚
Naá*i}aGaTaRXaLYaSaENDavbaiúk-aÛE" )
Aña<YaMaaegaMaihMaaiNa iNaæiPaTaaiNa
NaaePaSPa*éuNa*RhirdaSaiMavaSaurai<a )) 16 ))
yad-doḥṣu mā praṇihitaṁ guru-bhīṣma-karṇa-
naptṛ-trigarta-śalya-saindhava-bāhlikādyaiḥ
astrāṇy amogha-mahimāni nirūpitāni
nopaspṛśur nṛhari-dāsam ivāsurāṇi
yat—bajo cuya; doḥṣu—protección de los brazos; mā praṇihitam—encontrándome situado; guru—Droṇācārya; bhīṣma—Bhīṣma; karṇa—Karṇa; naptṛ—Bhūriśravā; trigarta—el rey Suśarmā; śalya—Śalya; saindhava—el rey Jayadratha; bāhlika—hermano de Mahārāja Śāntanu (el padre Bhīṣma); ādyaiḥ—ect.; astrāṇi—armas; amogha—invencible; mahimāni—muy poderosos; nirūpitāni—aplicaron; na—no; upaspṛśuḥ—tocaron; nṛhari-dāsam—el servidor de Nṛsiṁhadeva (Prahlāda); iva—como; asurāṇi—armas empleadas por los demonios.
TRADUCCIÓN
Grandes generales tales como Bhīsma, Droṇa, Karṇa, Bhūriśravā, Suśarmā, Śalya, Jayadratha y Bāhlika, dirigieron todos contra mí sus armas invencibles. Pero en virtud de Su gracia (del Señor Kṛṣṇa), no pudieron ni siquiera tocarme un cabello. Así mismo, Prahlāda Mahārāja, el supremo devoto del Señor Nṛsiṁhadeva, no fue afectado por las armas que los demonios emplearon contra él.
SIGNIFICADO
La historia de Prahlāda Mahārāja, el devoto de Nṛsiṁhadeva, se narra en el Séptimo Canto de El Śrīmad-Bhāgavatam. Prahlāda Mahārāja, un niñito de sólo cinco años, se volvió el objeto de la envidia de su padre, Hiraṇyakaśipu, únicamente por haberse convertido en devoto puro del Señor. El demonio padre empleó todas sus armas para matar al hijo devoto, Prahlāda, pero por la gracia del Señor, el niño se salvó de toda clase de acciones peligrosas que realizó su padre. Él fue lanzado a un fuego, al seno de un aceite hirviendo, desde la cima de una colina, bajo las patas de un elefante, y se le administró veneno. Por último, el propio padre tomó una cuchilla para matar a su hijo, por lo cual Nṛsiṁhadeva apareció y, en presencia del hijo, mató al atroz padre. Así pues, nadie puede matar al devoto del Señor. De la misma manera, Arjuna también fue salvado por el Señor, aunque grandes oponentes, tales como Bhīṣma, emplearon contra él toda clase de armas peligrosas.
Karṇa: Engendrado en Kuntī por el dios del Sol antes de que ella se casara con Mahārāja Pāṇḍu, Karṇa nació con ajorcas y aretes, signos extraordinarios que designan a un héroe intrépido. Al principio se llamaba Vasusena, pero cuando creció le regaló a Indradeva sus ajorcas y aretes naturales, y de ahí en adelante llegó a ser conocido como Vaikartana. Después de que la doncella Kuntī lo dio a luz, fue lanzado al Ganges. Luego fue recogido por Adhiratha, y él y su esposa Rādhā lo criaron como si fuera su propio hijo. Karṇa era muy caritativo, especialmente con los brāhmaṇas. No había nada de lo que no pudiera privarse por un brāhmaṇa. Con el mismo espíritu caritativo le dio a Indradeva como caridad sus ajorcas y aretes naturales, y éste último, quedando muy satisfecho con él, le dio a cambio una gran arma, denominada Śakti. Él fue aceptado como uno de los alumnos de Droṇācārya, y desde el mismo comienzo hubo cierta rivalidad entre él y Arjuna. Al ver su constante rivalidad con Arjuna, Duryodhana lo escogió como compañero, y su amistad creció gradualmente y se volvió muy íntima. El también estuvo presente en la gran asamblea de la función svayaṁvara de Draupadī, y cuando trató de exhibir su talento en esa reunión, el hermano de Draupadī declaró que Karṇa no podía participar en la competencia, por su condición de ser el hijo de un carpintero śūdra. Aunque fue rechazado de la competencia, aun así, cuando Arjuna atravesó con éxito el pez que servía de blanco en el techo y Draupadī le puso a Arjuna su guirnalda, Karṇa y los demás príncipes desilusionados le presentaron a Arjuna un obstáculo poco común, mientras se iba con Draupadī. Karṇa, especialmente, peleó con él de un modo muy valeroso, pero todos ellos fueron derrotados por Arjuna. Duryodhana estaba muy complacido con Karṇa por la constante rivalidad que había entre él y Arjuna, y cuando subió al poder, puso a Karṇa en el trono del Estado de Aṅga. Frustrado en su intento de ganarse a Draupadī, Karṇa le aconsejó a Duryodhana que atacara al rey Drupada, ya que después de derrotarlo, se iba a poder arrestar tanto a Arjuna como a Draupadī. Pero Droṇācārya los regaño por esa conspiración, y ellos se abstuvieron de llevarla a cabo. Karṇa fue vencido muchas veces, no sólo por Arjuna, sino también por Bhīmasena. Él era soberano del reino de Bengala, Orissa y Madrás juntos. Más adelante, tomó parte activa en el sacrificio Rājasūya de Mahārāja Yudhiṣṭhira, y cuando hubo una apuesta entre los hermanos rivales, apuesta planeada por Śakuni, Karṇa participó en ella, y se sintió muy complacido cuando se puso en juego a Draupadī. Esto avivó su vieja rencilla. Cuando Draupadī estaba en juego, lo anunció con mucho entusiasmo, y fue él quien le ordenó a Duḥśāsana que les quitara la ropa tanto a los Pāṇḍavas como a Draupadī. Él le pidió a Draupadī que eligiera otro esposo, porque, habiéndola perdido los Pāṇḍavas, se había convertido en esclava de los Kurus. Siempre fue un enemigo de los Pāṇḍavas, y cuando quiera que se presentaba la oportunidad, trataba de reprimirlos por todos los medios. Durante la Batalla de Kurukṣetra previó el resultado final, y expresó su opinión de que como el Señor Kṛṣṇa era el auriga de Arjuna, éste ganara la batalla. Siempre discrepó con Bhīṣma, y a veces se mostraba tan orgulloso como para decir que podía acabar con los Pāṇḍavas en cinco das, si Bhīṣma no interfería en sus planes. Pero se mortificó mucho cuando Bhīṣma murió. Él mató a Ghatotkacha con el arma Sakti que Indradeva le dio. Su hijo, Vṛṣasena, fue matado por Arjuna. Él mató al mayor número de soldados Pāṇḍavas. Al final tuvo una severa contienda con Arjuna, y fue sólo él quien pudo tumbarle a éste el yelmo. Pero ocurrió que una rueda de su cuadriga se atascó en el lodo del campo de batalla, y cuando se bajó para arreglarla, Arjuna aprovechó la oportunidad y lo mató, aunque le había pedido a Arjuna que no lo hiciera.
Naptā o Bhūriśvarā: Bhūriśvarā era hijo de Somadatta, un miembro de la familia Kuru. Él era hermano de Śalya. Ambos hermanos asistieron con su padre a la ceremonia svayaṁvara de Draupadī. Todos ellos apreciaron la maravillosa fuerza que Arjuna tenía por ser el devoto amigo del Señor, y, en consecuencia, Bhūriśvarā les aconsejó a los hijos de Dhṛtarāṣṭra que no riñeran ni pelearan con ellos. Todos ellos también asistieron al Rājasūya-yajña de Mahārāja Yudhiṣṭhira. El poseía un regimiento akṣauhinī compuesto de ejército, caballería, elefantes y cuadrigas, y todos ellos fueron empleados en la Batalla de Kurukṣetra en favor del bando de Duryodhana. Fue contado por Bhīma como uno de los yūtha-patis. En la Batalla de Kurukṣetra peleó especialmente con Sātyaki, y mató a diez hijos de éste. Posteriormente, Arjuna le cortó las manos, y al final fue matado por Sātyaki. Al morir se fundió en la existencia de Viśvadeva.
Trigarta o Suśarmā: Hijo de Mahārāja Vṛddhakṣetra, era el rey de Trigartadeśa, y también estuvo presente en la ceremonia svayaṁvara de Draupadī. Era uno de los aliados de Duryodhana, y le aconsejó a éste atacar el Matsyadeśa (Darbhaṅga). Durante la época en que ocurrió el robo de las vacas en Virāṭanagara, pudo arrestar a Mahārāja Virāṭa, pero luego éste fue liberado por Bhīma. El la Batalla de Kurukṣetra también peleó con mucha valentía, pero al final fue matado por Arjuna.
Jayadratha (hijo de Mahārāja). Otro hijo de Mahārāja Vṛddhakṣetra. Era el rey de Sindhudeśa (el actual Pakistán Sind). Tenía una esposa de nombre Duḥśalā. El también estuvo presente en la ceremonia svayaṁvara de Draupadī, y deseaba muy intensamente obtener su mano, pero falló en la competencia. Sin embargo, desde entonces siempre buscó la oportunidad de ponerse en contacto con ella. Cuando iba a Sālyadesa a casarse, ocurrió que en el camino a Kāmyavana vio a Draupadī de nuevo, y se sintió demasiado atraído a ella. Los Pāṇḍavas y Draupadī estaban entonces en el exilio, después perdido su imperio en el juego, y Jayadratha consideró prudente enviarle un mensaje de un modo ilícito a través de Koṭiśaṣya, uno de sus asociados. Draupadī de inmediato rechazó con vehemencia la proposición de Jayadratha, pero como él estaba tan atraído por la belleza de ella, trató una y otra vez. En cada una de las oportunidades, Draupadī lo rechazó. Él trató de llevársela a la fuerza en su cuadriga, y al principio Draupadī le dio un buen empujón, y él cayó como un árbol cortado de raíz. Pero no se desanimó, y logró sentar a Draupadī a la fuerza en la cuadriga. Este incidente fue visto por Dhaumya Muni, quien se quejó enérgicamente de la acción de Jayadratha. El también siguió la cuadriga, y a través de Dhātreyikā el asunto fue llevado a la atención de Mahārāja Yudhiṣṭhira. Los Pāṇḍavas atacaron entonces a los soldados de Jayadratha y los mataron a todos, y por último Bhīma atrapó a Jarādratha y lo golpeó muy severamente, hasta casi matarlo. Luego, se le cortó todo el cabello, dejándole únicamente cinco pelos, y fue llevado ante todos los reyes y presentado como el esclavo de Mahārāja Yudhiṣṭhira. Él fue obligado a admitir que era el esclavo de Mahārāja Yudhiṣṭhira ante toda la orden de los príncipes, y fue llevado ante Mahārāja Yudhiṣṭhira en la misma condición. Mahārāja Yudhiṣṭhira tuvo la gran bondad de ordenar que lo liberaran, y cuando aceptó convertirse en un príncipe subordinado a Mahārāja Yudhiṣṭhira, la reina Draupadī también deseó su liberación. Después de este incidente, se le permitió regresar a su país. Insultado así, fue a Gaṅgātrī, que está en los Himālayas, y se sometió a un severo tipo de penitencia para complacer al Señor Śiva. Él pidió la bendición de poder derrotar a todos los Pāṇḍavas, al menos uno a la vez. Luego comenzó la Batalla de Kurukṣetra, y se puso de parte de Duryodhana. En la pelea del primer día se enfrentó con Mahārāja Drupada, luego con Virāṭa y después con Abhimanyu. Mientras Abhimanyu era matado, habiendo sido rodeado despiadadamente por siete grandes generales, los Pāṇḍavas fueron a ayudarlo, pero Jayadratha, por la misericordia del Señor Śiva, los rechazó con gran habilidad. Ante esto, Arjuna hizo el voto de matarlo, y al oír eso, Jayadratha quiso irse del campo de guerra, y les pidió permiso a los Kauravas para su cobarde acción. Pero no se le permitió hacerlo. Por el contrario, se lo obligó a pelear con Arjuna, y mientras la pelea se llevaba a cabo, el Señor Kṛṣṇa le recordó a Arjuna que Śiva le había dado a Jayadratha la bendición de que cualquiera que le hiciera caer la cabeza al suelo, moriría al instante. Por lo tanto, le aconsejo a Arjuna que tirara la cabeza de Jayadratha directamente al regazo del padre de éste, el cual estaba dedicado a hacer penitencias en el lugar de peregrinaje conocido como Samanta-pañcaka. En efecto, Arjuna así lo hizo. El padre de Jayadratha se sorprendió al ver en su regazo una cabeza cercenada, y de inmediato la tiró al suelo. Él murió instantáneamente, con la frente resquebrajada en siete pedazos. (S.B. 1º, Cap. 15, V. 16, págs. 743-746).
TEXTO 17
SaaETYae v*Ta" ku-MaiTaNaaTMad wRìrae Mae
YaTPaadPaÚMa>avaYa >aJaiNTa >aVYaa" )
Maa& é[aNTavahMarYaae riQaNaae >auivï&
Na Pa[ahrNa( YadNau>aaviNarSTaictaa" )) 17 ))
sautye vṛtaḥ kumatinātmada īśvaro me
yat-pāda-padmam abhavāya bhajanti bhavyāḥ
māṁ śrānta-vāham arayo rathino bhuvi-ṣṭhaṁ
na prāharan yad-anubhāva-nirasta-cittāḥ
sautye—respecto a un auriga; vṛtaḥ—dedicado; kumatinā—por un mal estado de conciencia; ātma-daḥ—aquel que redime; īśvaraḥ—el Señor Supremo; me—mi; yat—cuyos; pāda-padmam—pies de loto; abhavāya—en lo referente a la salvación; bhajanti—prestan servicio; bhavyāḥ—la clase de los hombres inteligentes; mām—a mí; śrānta—sediento; vāham—mis caballos; arayaḥ—los enemigos; rathinaḥ—un gran general; bhuviṣṭham—mientras estaba parado en el suelo; na—no; prāharan—atacaron; yat—cuya; anubhāva—misericordia; nirasta—estando ausente; cittāḥ—la mente.
TRADUCCIÓN
Fue únicamente por Su misericordia que mis enemigos no se preocuparon de matarme, cuando descendí de mi cuadriga para conseguirles agua a mis sedientos caballos. Se debió a mi falta de estima por mi Señor que me atreví a ocuparlo como mi auriga, pues a Él lo adoran y le ofrecen servicios los mejores hombres, en busca de la salvación.
SIGNIFICADO
El Señor Supremo, la Personalidad de Dios Śrī Kṛṣṇa, es el objeto de la adoración tanto de los impersonalistas como de los devotos del Señor. Los impersonalistas adoran Su refulgencia radiante, que emana de Su trascendental cuerpo de eterna forma, bienaventuranza y conocimiento, y los devotos lo adoran como la Suprema Personalidad de Dios. Aquellos que incluso se encuentran por debajo de los impersonalistas, consideran que Él es uno de los grandes personajes de la historia. Sin embargo, el Señor desciende para atraer a todos mediante Sus pasatiempos trascendentales específicos, y para ello hace el papel del más perfecto amo, amigo, hijo y amante. Él tenía con Arjuna una relación de amigo, y desempeñó el papel perfectamente, tal como lo hizo con Sus parientes, amantes y esposas. Mientras el devoto actúa en esa relación tan perfecta y trascendental, por efecto de la potencia interna del Señor olvida que su amigo o hijo es la Suprema Personalidad de Dios, aunque a veces lo confunden los actos del Señor. Después de la partida del Señor, Arjuna estaba consciente de su gran amigo, pero no había ningún error por parte de Arjuna, ni ninguna estimación errada acerca del Señor. A los hombres inteligentes los atrae la trascendental actuación que el Señor tiene con un devoto puro e inmaculado como Arjuna.
En el campo de guerra, la escasez de agua es un hecho bien conocido. Ahí el agua es muy difícil de conseguir, y tanto los animales como los hombres, debido a su arduo trabajo en dicho campo, requieren constantemente de ella para calmar la sed. En especial los soldados y generales heridos se sienten muy sedientos en el momento de morir, y ocurre que, a veces, sólo por la falta de agua, uno tiene que morir inevitablemente. Pero en la batalla de Kurukṣetra esa escasez de agua se resolvía con perforar la tierra. Por la gracia de Dios, en cualquier parte puede conseguirse agua fácilmente, si hay manera de taladrar el suelo. El sistema moderno funciona bajo el mismo principio de perforar el suelo, pero los ingenieros modernos, aún son incapaces de excavar rápidamente donde sea necesario. Sin embargo, según la historia que se remonta hasta los días de los Pāṇḍavas, parece ser que grandes generales tales como Arjuna podían de inmediato suministrarles agua incluso a los caballos – huelga decir que a los hombres -, extrayéndola del duro suelo con sólo clavar una afilada flecha en el estrato, un método que aún desconocen los científicos modernos. (S.B. 1º, Cap. 15, V. 17, págs. 746-748).
Arjuna reprendido por Kṛṣṇa:
TEXTO 26
PauåzSv>aavivihTaaNa( YaQaav<a| YaQaaé[MaMa( )
vEraGYaraGaaePaaiDa>YaaMaaManaTaae>aYal/+a<aaNa( )) 26 ))
puruṣa-sva-bhāva-vihitān
yathā-varṇaṁ yathāśramam
vairāgya-rāgopādhibhyām
āmnātobhaya-lakṣaṇān
puruṣa—el ser humano; sva-bhāva—por sus propias cualidades adquiridas; vihitān—prescritas; yathā—de acuerdo con; varṇam—clasificación de las castas; yathā—de acuerdo con; āśramam—órdenes de vida; vairāgya—desapego; rāga—apego; upādhibhyām---por dichas designaciones; āmnāta—sistemáticamente; ubhaya—ambos; lakṣaṇān—signos.
TRADUCCIÓN
Ante la pregunta de Mahārāja Yudhiṣṭhira, Bhīṣmadeva definió primero todas las clasificaciones de castas y órdenes de vida en función de las cualidades del individuo. Luego, de un modo sistemático y con dos divisiones, describió la neutralización mediante el desapego y la interacción mediante el apego.
SIGNIFICADO
El concepto de las cuatro castas y cuatro órdenes de vida, tal como las planeó el propio Señor (Bg. 4.13), tiene por objeto acelerar las cualidades trascendentales del individuo, de manera que éste pueda comprender gradualmente su identidad espiritual, y así actuar conforme a ello para liberarse del cautiverio material, o la vida condicionada. En casi todos los Purāṇas, el asunto en cuestión se describe con el mismo espíritu, y, de igual modo, también en El Mahābhārata Bhīṣmadeva lo describe más detalladamente en el Śānti-parva, comenzando desde el capítulo sesenta.
El varṇāśrama-dharma se prescribe para el ser humano civilizado, tan sólo para enseñarle a culminar con éxito la vida humana. La autorrealización se distingue de la vida de los animales inferiores, dedicados a comer, dormir, temer y aparearse. Bhīṣmadeva recomendó nueve cualidades que deben reunir todos los seres humanos: 1) no enfurecerse, 2) no mentir, 3) distribuir riquezas equitativamente, 4) perdonar, 5) engendrar hijos únicamente con la esposa legítima de uno, 6) ser de mente pura y de cuerpo sano, 7)no ser hostil con nadie, 8) ser sencillo, 9) mantener a sirvientes y subordinados. A uno no puede llamársele una persona civilizada, si no adquiere las antedichas cualidades preliminares. Además de éstas, los brāhmaṇas (los hombres inteligentes), los administradores, la comunidad mercantil y la clase laboral deben adquirir cualidades especiales, en función de los deberes de las ocupaciones que se mencionan en todas las Escrituras védicas. Para los hombres inteligentes, controlar los sentidos es la cualidad más esencial. Ella es la base de la moralidad. La satisfacción sexual, incluso con la esposa legítima, también debe ser controlada, y con ello el control familiar seguirá automáticamente. Un hombre inteligente abusa de sus grandes capacidades, si no sigue el modo de vida védico. Esto significa que debe estudiar con toda seriedad las Escrituras védicas, especialmente El Śrīmad-Bhāgavatam y El Bhagavad-gītā. Para aprender el conocimiento védico, hay que acudir a una persona que esté dedicada en un ciento por ciento al servicio devocional. Dicha persona no debe hacer cosas que estén prohibidas en los śāstras. El hombre que bebe o fuma no puede ser maestro. En el sistema moderno de educación, sólo se toma en cuenta la capacitación académica del profesor, sin evaluar su nivel moral. Por lo tanto, el resultado de la educación es que de muchísimas maneras se hace un mal uso de la elevada inteligencia.
Al kṣatriya, el miembro de la clase administrativa, se le aconseja especialmente dar caridad y no aceptar caridad bajo ninguna circunstancia. Los administradores modernos reúnen contribuciones para algunas funciones políticas, pero nunca les dan caridad a los ciudadanos en ninguna función estatal. Los mandamientos de los śāstras indican justamente lo opuesto. Los miembros de la clase administrativa deben estar bien versados en los śāstras, pero no deben adoptar la profesión de maestros. Los administradores nunca deben tratar de volverse no violentos y de ese modo ir al infierno. Cuando en el campo de batalla de Kurukṣetra Arjuna quiso volverse un cobarde no violento, fue severamente regañado por el Señor Kṛṣṇa. En esa ocasión, el Señor puso a Arjuna en el nivel de un hombre incivilizado, por su declarada aceptación del culto de la no violencia. La clase administrativa debe ser adiestrada personalmente en lo referente a la educación militar. Los cobardes no deben ser elevados al trono presidencial únicamente a fuerza de votos numéricos. Los monarcas eran todos personalidades heroicas, y, por consiguiente, la monarquía debe mantenerse, siempre y cuando al monarca se le adiestre regularmente en lo que respecta a los deberes propios de la posición de rey. En tiempos de guerra, el rey o el presidente nunca debe regresar a casa sin ser herido por el enemigo. El mal llamado rey de hoy en día nunca visita el campo de guerra. Él es sumamente experto en animar de un modo artificial a las fuerzas combatientes, con la esperanza de obtener un falso prestigio nacional. Tan pronto como la clase administrativa se convierte en una camarilla de comerciantes y obreros, toda la maquinaria gubernamental se contamina.
A los vaiśyas, los miembros de las comunidades mercantiles, se les recomienda especialmente proteger a las vacas. La protección de las vacas da como resultado el aumento de los productos lácteos, es decir, la cuajada y la mantequilla. La agricultura y la distribución de los comestibles constituyen los deberes principales de la comunidad mercantil, respaldada por la educación en el conocimiento védico, y adiestrada para dar caridad. Así como a los kṣatriyas se les ponía a cargo de la protección de los ciudadanos, a los vaiśyas se les ponía a cargo de la protección de los animales. A los animales nunca se les debe matar. La matanza de animales es símbolo de una sociedad bárbara. Los productos agrícolas, las frutas y la leche le proporcionan al ser humano comestibles suficientes y compatibles. La sociedad humana debe darle más atención a la protección de los animales. La energía productiva del obrero se desperdicia cuando la emplean las empresas industriales. Los diversos tipos de industrias que existen no pueden producir las cosas esenciales para el hombre, es decir, el arroz, el trigo, los granos, la leche, las frutas y las verduras. La producción de máquinas y máquinas herramientas aumenta el modo de vida artificial de una clase de intereses creados, y mantiene a miles de hombres en medio del hambre y la inquietud. Ésa no debe ser la pauta de la civilización.
La clase śūdra es poco inteligente y no debe dársele independencia. Su función es la de prestarles un servicio sincero a los tres sectores superiores de la sociedad. La clase śūdra puede obtener todas las comodidades de la vida con simplemente prestarles servicio a las clases superiores. Se estipula especialmente que un śūdra nunca debe acumular dinero. Tan pronto como los śūdras acumulan riquezas, las malgastan en actividades pecaminosas relacionadas con el vino, las mujeres y el juego. El vino, las mujeres y el juego indican que la población se ha degradado hasta una categoría más baja que śūdra. Las castas superiores siempre deben ocuparse de la manutención de los śūdras, y deben proveerles de ropa vieja y usada. Un śūdra no debe abandonar a su amo cuando éste sea viejo e inválido, y el amo debe mantener satisfechos a los sirvientes con ropa y comida suntuosa, antes de la ejecución de cualquier sacrificio. En esta era se realizan muchísimas funciones en las que se gastan millones, pero al pobre trabajador no se le alimenta suntuosamente, ni se le da caridad, ropa, etc. Los trabajadores se hallan, pues, insatisfechos, y, en consecuencia, causan agitación.
Los varṇas son, por así decirlo, clasificaciones de las diferentes ocupaciones, y el āśrama-dharma denota el progreso gradual en el sendero de la autorrealización. Ambos están interrelacionados, y el uno depende del otro. El propósito principal del āśrama-dharma es el de inculcar conocimiento y desapego. El brahmacarya-āśrama es el campo de entrenamiento de los candidatos aspirantes. En ese āśrama se enseña que este mundo material no es en realidad el hogar del ser viviente. Las almas condicionadas que se hallan bajo el cautiverio material son prisioneras de la materia, y, por consiguiente, la autorrealización constituye el fin último de la vida. Todo el sistema de āśrama-dharma es un medio para lograr el desapego. A aquel que no asimila este espíritu de desapego, se le permite entrar en la vida familiar con el mismo espíritu de desapego. Por lo tanto, aquel que alcanza el estado de desapego puede adoptar de inmediato la cuarta orden, es decir, la orden de renuncia, y así vivir únicamente de caridad, no para acumular riquezas, sino sólo para mantener el cuerpo y el alma juntos a fin de llegar a la comprensión máxima. La vida de casado es para aquel que está apegado, y las órdenes de vida de vānaprastha y sannyāsa son para aquellos que están desapegados de la vida material. El brahmacarya-āśrama tiene especialmente por objeto formar tanto al apegado como al desapegado. (S.B. 1º, Cap. 9, V. 26, págs. 439–442).