SRI
NRSIMHADEVA
SRI NRSIMHADEVA
Creado por juancas el sábado, 17 de diciembre de 2011 a la(s) 16:10
Censura de un gobierno que mata a las vacas
de Visuddha-sattva Das (Notas)el sábado, 17 de diciembre de 2011 a la(s) 16:10CONTENIDO
NOTAS de Visuddha-sattva Das
Publicadas en el AÑO 2011, 2012- Algunos slokas sobre el Sri-Nama - sábado, 15 de enero de 2011
- El Pancha-tattva mantra y el Santo Nombre
- Las ofensas al Santo Nombre - sábado, 15 de enero de 2011
- Los tres niveles del canto del maha-mantra - sábado, 15 de enero de 2011
- Sambhanda, abhideya y prayojana - sábado, 15 de enero de 2011
- Sri Siksastakam: Las 8 instrucciones fundamentales de Sri Chaitanya Mahaprabhu - sábado, 15 de enero de 2011
- La síntesis del Sri Siksastakam - sábado, 15 de enero de 2011
- El primer verso del Sri Siksastakam y las siete excelencias del Nama - sábado, 15 de enero de 2011
- Resumen del proceso del bhakti y el Madhurya-kadambini - sábado, 15 de enero de 2011
- El Siksastaka y las nueve etapas del bhakti: de sradda hasta prema - sábado, 15 de enero de 2011
- Bhakti-rasamrta sindhu sobre el tema del Siksastakam
- Sri Siksastakam [Ocho instrucciones / Eight Instructions] Sri Chaitanya (CC) Sánscrito/Sanskrit
- Diksa-guru y siksa-guru: La relación maestro-discípulo - sábado, 15 de enero de 2011
- Tres clases de gurus y tres clases de Vaisnavas - sábado, 15 de enero de 2011
- La Naturaleza del Santo Nombre —Testimonios relevantes— - sábado, 15 de enero de 2011
- Dos testimonios de Srila Bhaktivinoda Thakur: - sábado, 15 de enero de 2011
- Sri Nama (Canción en versos bengalíes) - sábado, 15 de enero de 2011
- Nama-bhajana es la mejor práctica del bhakti - sábado, 15 de enero de 2011
- Japa-mala y Nama-sankhya - sábado, 15 de enero de 2011
- Clases de mantras. Nombres primarios y secundarios - sábado, 15 de enero de 2011
- Rasayana-japa - sábado, 15 de enero de 2011
- Cantos distintos, rasas distintas - sábado, 15 de enero de 2011
- Técnicas y consejos prácticos para mejorar la meditación de japa
- Técnicas y consejos prácticos para mejorar la meditación de japa - sábado, 15 de enero de 2011
- Oraciones para superar las ofensas
- Oraciones para superar las ofensas
- La concepción madhurya-bhava del maha-mantra
- Fragmentos de mi curso sobre el santo nombre de Visuddha-sattva Das
- 2_Apéndice 2 del Curso sobre el Santo Nombre - sábado, 15 de enero de 2011
- La comprensión de Nama-tattva
- Los tres niveles en el proceso del bhakti
- Disipando la nube del anartha
- Siguiendo los pasos de los grandes acharyas
- Sambhanda, abhideya y prayojana
- 4_Iluminaciones sobre Nama-aparadha - sábado, 15 de enero de 2011
- 3_Iluminaciones sobre Nama-aparadha - sábado, 15 de enero de 2011
- 2_Iluminaciones sobre Nama-aparadha - sábado, 15 de enero de 2011
- 1_Iluminaciones sobre Nama-aparadha - sábado, 15 de enero de 2011
- Visuddha-sattva Das - INDICE de NOTAS VAISHNAVAS
CURSO DEL SANTO NOMBRE
Apéndice 1
Apéndice 2
Apéndice 3
Apéndice 4
Apéndice 5
Apéndice 6
Apéndice 7
Apéndice 8
Mas Notas
Las ofensas al Santo Nombre
Censura de un gobierno que mata a las vacas
17 de diciembre de 2011 a la(s) 16:10
Censura de un gobierno que mata a las vacas
En la cultura védica la vaca es considera como una de la siete madres. Produce leche, la sustancia más milagrosa y nutritiva para la vida. De la leche se produce el yogur, la mantequilla, el queso y el ghee, que es la mantequilla clarificada y el medio de cocción ideal. El Ayur Veda dice que los productos lácteos y el ghee nutren los tejidos del cerebro y contribuyen al desarrollo de la inteligencia y la longevidad.
Por su basamento espiritual, la cultura védica se centra en la protección de las vacas y de los brahmanas. Sri Krishna Gopal es un vaquero y ama a las vacas. Matar a la vaca es una actividad impía tan abominable como matar a la madre. Al matar a las vacas de manera indiscriminada la sociedad moderna está incurriendo en la más vil herejía.
Los mataderos del ganado vacuno consituyen unos infiernos generadores del peor de los karmas. Quienes están involucrados en tales acciones pecaminosas, en cualquier parte de la cadena, recibirán las peores reacciones debido a tan impío ultraje y crueldad al asesinar a la madre vaca, tan solo para satisfacer el voraz apetito de los karmis de comer carne, producto de la matanza de animales inocentes.
La matanza de las vacas y de los animales en general (pollos, pescados, embriones, etc.), es una de las actividades pecaminosas que imperan en esta era de Kali-yuga tan degradada. Donde exista la matanza de anmales, los juegos de azar, el consumo de drogas y estupecacientes, el consumo de bebidas alcohólicás, la prostitución, el ansía por el dinero ilícito y su lavado bancario, la corrupción estatal de los gobiernos, la falta de honestidad y de valores éticos y morales, el respeto por la naturaleza y la protección ambiental, habrá una debacle de los principios religiosos que deben regir una sociedad humana civilizada.
Como explica el Bhagavatam (1.17), la influencia de Kali reina donde imperan las siguientes actividades pecaminosas: los juegos de azar, la prostitución, la bebida y la matanza de animales. Los principios básicos de la irreligiosidad, tales como el orgullo, la prostitución, la embriaguez y la falsedad, contrarrestan los cuatro principios de la religión, es decir, la austeridad, la limpieza, la misericordia y la veracidad, que son los pilares de la vida piadosa.
En el diálogo entre el rey Pariksit y la figura del dharma, en la forma del toro al que Kali que había cortado cruelmente tres patas, se encuentra la siguiente descripción del Srimad-Bhagavatam (1.17.10-11), que confirma los señalamientos anteriores:
“¡Oh, tú, que eres casta!, el buen nombre del rey, la duración de su vida y su buen nacimiento futuro desaparecen, cuando en su reino los malvados aterrorizan a toda clase de seres vivientes. El rey tiene sin duda el deber fundamental de mitigar primero los sufrimientos de aquellos que sufren. Por lo tanto, debo matar a este hombre tan despreciable, ya que es violento con otros seres vivientes”.
En el significado de este verso Srila Prabhupada expresa lo siguiente:
“Cuando en una aldea o en un pueblo hay alguna perturbación causada por animales salvajes, la policía u otras personas toman medidas para matarlos. De modo similar, el gobierno tiene el deber de matar cuanto antes a todos los elementos sociales malos, tales como los ladrones, los dacoits [miembros de una banda de asaltantes en India] y los asesinos. El mismo castigo se les debe imponer también a los que matan animales, porque los animales del Estado también son el praja. Praja significa “aquel que ha nacido en el Estado”, y esto incluye tanto a los hombres como a los animales. Cualquier ser viviente que nace en un Estado tiene el derecho primordial de vivir bajo la protección del rey. Los animales de la selva también dependen del rey, y también tienen el derecho de vivir. Así que, con mayor razón, animales domésticos tales como las vacas y los toros.
Cualquier ser viviente que aterrorice a otros es un sujeto de lo más despreciable, y el rey debe matar de inmediato a semejante elemento perturbador. Así como se mata al animal salvaje cuando ocasiona disturbios, de igual forma cualquier hombre que sin razón mata o aterroriza a los animales de la selva o a otros animales, debe ser castigado de inmediato. Por ley del Señor Supremo, todos los seres vivos, sea cual fuere la forma que tengan, son los hijos del Señor, y nadie tiene ningún derecho de matar a un animal, a menos que lo ordenen así los códigos de la ley natural. El tigre puede matar a un animal inferior para su subsistencia, pero el hombre no puede matar a un animal para la suya. Ésa es la ley de Dios, quien ha creado la ley para que un ser viviente subsista de comerse a otro. Así pues, los vegetarianos también viven de comerse a otros seres vivientes. Por lo tanto, la ley dice que uno debe vivir únicamente de comer a ciertos seres vivientes específicos, como lo ordena la ley de Dios. El Isopanisad indica que uno debe vivir de acuerdo con las instrucciones del Señor, y no como se le antoje. El hombre puede subsistir a base de diferentes variedades de granos, frutas y leche que ordena Dios, y no hay necesidad de carne animal, más que en ciertos casos particulares.
El rey o mandatario engañado, aunque a veces se lo anuncie como un gran filósofo o erudito, permitirá en el Estado la existencia de mataderos, sin saber que la tortura de los pobres animales les despeja el camino al infierno a esos necios reyes y gobernantes. El gobernante siempre debe estar pendiente de la seguridad de los prajas, tanto hombres como animales, e investigar si algún ser viviente está siendo atormentado por otro en algún lugar. El ser viviente agresor debe ser atrapado de inmediato y ejecutado, tal como lo enseñó Maharaja Parisit.
El gobierno del pueblo por el pueblo no debe permitir la matanza de animales inocentes, por el capricho de necios funcionarios gubernamentales. La gente debe conocer los códigos de Dios, tal como se mencionan en las Escrituras reveladas. Maharaja Parisit señala aquí que, según los códigos de Dios, el rey o gobernante irresponsable pone en peligro su buen nombre, la duración de su vida, su poder y su fuerza, y, en fin de cuentas, su marcha progresiva hacia una vida mejor y la salvación después de la muerte. Esos hombres necios ni siquiera creen en la existencia de una siguiente vida.
Mientras escribimos el comentario acerca de este verso en particular, tenemos ante nosotros la declaración de un gran político moderno que murió recientemente y dejó su testamento, el cual revela su escaso acopio de conocimiento en relación con los códigos de Dios que mencionó Maharaja Parisit. El político era tan ignorante en materia de los códigos de Dios que escribe: “No creo en ninguna de esas ceremonias, y someterse a ellas, incluso como una cuestión de formalidad, sería hipocresía y un intento de engañarnos nosotros mismos y engañar a los demás... no tengo ningún sentimiento religioso al respecto.
Al comparar estas declaraciones de un gran político de la época moderna con las de Maharaja Pariksit, encontramos una enorme diferencia. Maharaja Parisit era piadoso de conformidad con los códigos de las Escrituras, mientras que el político moderno se rige por su creencia y sentimientos personales. Al fin y al cabo, cualquier gran hombre del mundo material es un alma condicionada. A él lo atan de pies y manos las sogas de la naturaleza material, y aun así la necia alma condicionada se cree en libertad de actuar según sus caprichosos sentimientos. Se concluye, entonces, que la gente de los tiempos de Maharaja Parisit era feliz y los animales recibían la debida protección, porque el gobernante no era caprichoso ni ignoraba la ley de Dios. Criaturas necias y carentes de fe tratan de hacer a un lado la existencia del Señor, y proclaman ser seglares al precio de la valiosa vida humana. La vida humana está especialmente hecha para conocer la ciencia de Dios, pero criaturas necias, especialmente en esta era de Kali, en vez de conocer a Dios de un modo científico, hacen propaganda en contra de la creencia religiosa, así como también en contra de la existencia de Dios, aun a pesar de que siempre están atadas por las leyes de Dios mediante las condiciones del nacimiento, la muerte, la vejez y las enfermedades”.
En su significado del Srimad-Bhagavatam (1.17.32) Srila Prabhupada también es muy contundente en sus señalamientos:
“Los principios de la religión, es decir, la austeridad, la limpieza, la misericordia y la veracidad, tal como ya lo hemos discutido, puede practicarlos el seguidor de cualquier fe. No hay necesidad de cambiar de la fe hindú a la mahometana, a la cristiana o a alguna otra fe, y de ese modo volverse un renegado y no seguir los principios de la religión. La religión Bhagavatam exhorta a seguir los principios de la religión. Los principios de la religión no son los dogmas o principios regulativos de una determinada fe. Esos principios regulativos puede que difieran en términos de tiempo y lugar de interés. Lo que hay que ver es si los objetivos de la religión se han alcanzado. El aferrarse a los dogmas y fórmulas sin llegar a los verdaderos principios, no es bueno. Un Estado seglar puede que sea imparcial respecto a cualquier tipo específico de fe, pero no puede ser indiferente a los principios de la religión que se mencionaron anteriormente. Mas, en la era de Kali, los gobernantes del Estado serán indiferentes a esa clase de principios religiosos, y, en consecuencia, bajo su patrocinio aparecerán naturalmente los oponentes de los principios religiosos, oponentes tales como la codicia, la falsedad, el engaño y el despilfarro, en virtud de lo cual no tendrá sentido la propaganda que pide a voces que se detenga la corrupción del Estado”.
La proliferación de gobiernos impíos se debe a permitir estas actividades pecaminosas y no tener en cuenta los preceptos básicos de la religiosidad. Srila Jiva Gosvami señala que es irreligioso ir en contra los principios de las Escrituras, la relación con mujeres fuera del matrimonio, embriagarse y/o intoxicarse, así como la matanza cruel de los animales para la alimentación colectiva, que en la actualidad se ha convertido en un negocio corporativo mundial, a través de cadenas de restaurantes de comida basura y franquicias diseminadas por todas partes, para el lucro ilícito de un comercio vil e insano. Todo eso va en contra de las disposiciones de las Escrituras.
Estos y otros aspectos de la degradación de Kali-yuga por parte de los actuales líderes y gobiernos corruptos, que son cómplices o copartícipes de la matanza de animales, tan sólo para sustentar una degradada economía materialista, son otros síntomas de la ignorancia de los valores espiritual que impera en esta era de Kali. Las consecuencias de un gobierno impío que incurre en tales actos pecaminosos serán analizadas en la próxima nota, sustentadas en las descripciones del Srimad-Bhagavatam sobre este y otros síntomas de la degradación de Kali-yuga.
Vaisnava dasanudasa
Visuddha-sattva dasa
(Bhaktivedanta Institute)
OM TAT SAT
En la cultura védica la vaca es considera como una de la siete madres. Produce leche, la sustancia más milagrosa y nutritiva para la vida. De la leche se produce el yogur, la mantequilla, el queso y el ghee, que es la mantequilla clarificada y el medio de cocción ideal. El Ayur Veda dice que los productos lácteos y el ghee nutren los tejidos del cerebro y contribuyen al desarrollo de la inteligencia y la longevidad.
Por su basamento espiritual, la cultura védica se centra en la protección de las vacas y de los brahmanas. Sri Krishna Gopal es un vaquero y ama a las vacas. Matar a la vaca es una actividad impía tan abominable como matar a la madre. Al matar a las vacas de manera indiscriminada la sociedad moderna está incurriendo en la más vil herejía.
Los mataderos del ganado vacuno consituyen unos infiernos generadores del peor de los karmas. Quienes están involucrados en tales acciones pecaminosas, en cualquier parte de la cadena, recibirán las peores reacciones debido a tan impío ultraje y crueldad al asesinar a la madre vaca, tan solo para satisfacer el voraz apetito de los karmis de comer carne, producto de la matanza de animales inocentes.
La matanza de las vacas y de los animales en general (pollos, pescados, embriones, etc.), es una de las actividades pecaminosas que imperan en esta era de Kali-yuga tan degradada. Donde exista la matanza de anmales, los juegos de azar, el consumo de drogas y estupecacientes, el consumo de bebidas alcohólicás, la prostitución, el ansía por el dinero ilícito y su lavado bancario, la corrupción estatal de los gobiernos, la falta de honestidad y de valores éticos y morales, el respeto por la naturaleza y la protección ambiental, habrá una debacle de los principios religiosos que deben regir una sociedad humana civilizada.
Como explica el Bhagavatam (1.17), la influencia de Kali reina donde imperan las siguientes actividades pecaminosas: los juegos de azar, la prostitución, la bebida y la matanza de animales. Los principios básicos de la irreligiosidad, tales como el orgullo, la prostitución, la embriaguez y la falsedad, contrarrestan los cuatro principios de la religión, es decir, la austeridad, la limpieza, la misericordia y la veracidad, que son los pilares de la vida piadosa.
En el diálogo entre el rey Pariksit y la figura del dharma, en la forma del toro al que Kali que había cortado cruelmente tres patas, se encuentra la siguiente descripción del Srimad-Bhagavatam (1.17.10-11), que confirma los señalamientos anteriores:
yasya rastre prajah sarvas
trasyante sadhvy asadhubhih
tasya mattasya nasyanti
kirtir ayur bhago gatih
trasyante sadhvy asadhubhih
tasya mattasya nasyanti
kirtir ayur bhago gatih
esa rajñam paro dharmo
hy artanam arti-nigrahah
ata enam vadhisyami
bhuta-druham asattamam
hy artanam arti-nigrahah
ata enam vadhisyami
bhuta-druham asattamam
“¡Oh, tú, que eres casta!, el buen nombre del rey, la duración de su vida y su buen nacimiento futuro desaparecen, cuando en su reino los malvados aterrorizan a toda clase de seres vivientes. El rey tiene sin duda el deber fundamental de mitigar primero los sufrimientos de aquellos que sufren. Por lo tanto, debo matar a este hombre tan despreciable, ya que es violento con otros seres vivientes”.
En el significado de este verso Srila Prabhupada expresa lo siguiente:
“Cuando en una aldea o en un pueblo hay alguna perturbación causada por animales salvajes, la policía u otras personas toman medidas para matarlos. De modo similar, el gobierno tiene el deber de matar cuanto antes a todos los elementos sociales malos, tales como los ladrones, los dacoits [miembros de una banda de asaltantes en India] y los asesinos. El mismo castigo se les debe imponer también a los que matan animales, porque los animales del Estado también son el praja. Praja significa “aquel que ha nacido en el Estado”, y esto incluye tanto a los hombres como a los animales. Cualquier ser viviente que nace en un Estado tiene el derecho primordial de vivir bajo la protección del rey. Los animales de la selva también dependen del rey, y también tienen el derecho de vivir. Así que, con mayor razón, animales domésticos tales como las vacas y los toros.
Cualquier ser viviente que aterrorice a otros es un sujeto de lo más despreciable, y el rey debe matar de inmediato a semejante elemento perturbador. Así como se mata al animal salvaje cuando ocasiona disturbios, de igual forma cualquier hombre que sin razón mata o aterroriza a los animales de la selva o a otros animales, debe ser castigado de inmediato. Por ley del Señor Supremo, todos los seres vivos, sea cual fuere la forma que tengan, son los hijos del Señor, y nadie tiene ningún derecho de matar a un animal, a menos que lo ordenen así los códigos de la ley natural. El tigre puede matar a un animal inferior para su subsistencia, pero el hombre no puede matar a un animal para la suya. Ésa es la ley de Dios, quien ha creado la ley para que un ser viviente subsista de comerse a otro. Así pues, los vegetarianos también viven de comerse a otros seres vivientes. Por lo tanto, la ley dice que uno debe vivir únicamente de comer a ciertos seres vivientes específicos, como lo ordena la ley de Dios. El Isopanisad indica que uno debe vivir de acuerdo con las instrucciones del Señor, y no como se le antoje. El hombre puede subsistir a base de diferentes variedades de granos, frutas y leche que ordena Dios, y no hay necesidad de carne animal, más que en ciertos casos particulares.
El rey o mandatario engañado, aunque a veces se lo anuncie como un gran filósofo o erudito, permitirá en el Estado la existencia de mataderos, sin saber que la tortura de los pobres animales les despeja el camino al infierno a esos necios reyes y gobernantes. El gobernante siempre debe estar pendiente de la seguridad de los prajas, tanto hombres como animales, e investigar si algún ser viviente está siendo atormentado por otro en algún lugar. El ser viviente agresor debe ser atrapado de inmediato y ejecutado, tal como lo enseñó Maharaja Parisit.
El gobierno del pueblo por el pueblo no debe permitir la matanza de animales inocentes, por el capricho de necios funcionarios gubernamentales. La gente debe conocer los códigos de Dios, tal como se mencionan en las Escrituras reveladas. Maharaja Parisit señala aquí que, según los códigos de Dios, el rey o gobernante irresponsable pone en peligro su buen nombre, la duración de su vida, su poder y su fuerza, y, en fin de cuentas, su marcha progresiva hacia una vida mejor y la salvación después de la muerte. Esos hombres necios ni siquiera creen en la existencia de una siguiente vida.
Mientras escribimos el comentario acerca de este verso en particular, tenemos ante nosotros la declaración de un gran político moderno que murió recientemente y dejó su testamento, el cual revela su escaso acopio de conocimiento en relación con los códigos de Dios que mencionó Maharaja Parisit. El político era tan ignorante en materia de los códigos de Dios que escribe: “No creo en ninguna de esas ceremonias, y someterse a ellas, incluso como una cuestión de formalidad, sería hipocresía y un intento de engañarnos nosotros mismos y engañar a los demás... no tengo ningún sentimiento religioso al respecto.
Al comparar estas declaraciones de un gran político de la época moderna con las de Maharaja Pariksit, encontramos una enorme diferencia. Maharaja Parisit era piadoso de conformidad con los códigos de las Escrituras, mientras que el político moderno se rige por su creencia y sentimientos personales. Al fin y al cabo, cualquier gran hombre del mundo material es un alma condicionada. A él lo atan de pies y manos las sogas de la naturaleza material, y aun así la necia alma condicionada se cree en libertad de actuar según sus caprichosos sentimientos. Se concluye, entonces, que la gente de los tiempos de Maharaja Parisit era feliz y los animales recibían la debida protección, porque el gobernante no era caprichoso ni ignoraba la ley de Dios. Criaturas necias y carentes de fe tratan de hacer a un lado la existencia del Señor, y proclaman ser seglares al precio de la valiosa vida humana. La vida humana está especialmente hecha para conocer la ciencia de Dios, pero criaturas necias, especialmente en esta era de Kali, en vez de conocer a Dios de un modo científico, hacen propaganda en contra de la creencia religiosa, así como también en contra de la existencia de Dios, aun a pesar de que siempre están atadas por las leyes de Dios mediante las condiciones del nacimiento, la muerte, la vejez y las enfermedades”.
En su significado del Srimad-Bhagavatam (1.17.32) Srila Prabhupada también es muy contundente en sus señalamientos:
“Los principios de la religión, es decir, la austeridad, la limpieza, la misericordia y la veracidad, tal como ya lo hemos discutido, puede practicarlos el seguidor de cualquier fe. No hay necesidad de cambiar de la fe hindú a la mahometana, a la cristiana o a alguna otra fe, y de ese modo volverse un renegado y no seguir los principios de la religión. La religión Bhagavatam exhorta a seguir los principios de la religión. Los principios de la religión no son los dogmas o principios regulativos de una determinada fe. Esos principios regulativos puede que difieran en términos de tiempo y lugar de interés. Lo que hay que ver es si los objetivos de la religión se han alcanzado. El aferrarse a los dogmas y fórmulas sin llegar a los verdaderos principios, no es bueno. Un Estado seglar puede que sea imparcial respecto a cualquier tipo específico de fe, pero no puede ser indiferente a los principios de la religión que se mencionaron anteriormente. Mas, en la era de Kali, los gobernantes del Estado serán indiferentes a esa clase de principios religiosos, y, en consecuencia, bajo su patrocinio aparecerán naturalmente los oponentes de los principios religiosos, oponentes tales como la codicia, la falsedad, el engaño y el despilfarro, en virtud de lo cual no tendrá sentido la propaganda que pide a voces que se detenga la corrupción del Estado”.
La proliferación de gobiernos impíos se debe a permitir estas actividades pecaminosas y no tener en cuenta los preceptos básicos de la religiosidad. Srila Jiva Gosvami señala que es irreligioso ir en contra los principios de las Escrituras, la relación con mujeres fuera del matrimonio, embriagarse y/o intoxicarse, así como la matanza cruel de los animales para la alimentación colectiva, que en la actualidad se ha convertido en un negocio corporativo mundial, a través de cadenas de restaurantes de comida basura y franquicias diseminadas por todas partes, para el lucro ilícito de un comercio vil e insano. Todo eso va en contra de las disposiciones de las Escrituras.
Estos y otros aspectos de la degradación de Kali-yuga por parte de los actuales líderes y gobiernos corruptos, que son cómplices o copartícipes de la matanza de animales, tan sólo para sustentar una degradada economía materialista, son otros síntomas de la ignorancia de los valores espiritual que impera en esta era de Kali. Las consecuencias de un gobierno impío que incurre en tales actos pecaminosos serán analizadas en la próxima nota, sustentadas en las descripciones del Srimad-Bhagavatam sobre este y otros síntomas de la degradación de Kali-yuga.
Vaisnava dasanudasa
Visuddha-sattva dasa
(Bhaktivedanta Institute)
OM TAT SAT
El crimen más cruel es matar a la vaca
Maharaj Pariksit quería matar al pecaminoso Kali por haber cortado las tres patas de la vaca. Lo desterró donde se cometieran las cuatro actividades pecaminosas mencionadas en este nota, que son los síntomas de la era de Kali.
Para contrarrestar la influencia perniciosa de Kali-yuga hay que predicar la conciencia de Krishna
Una vaca en un templo de Vraja. Todas son sagradas.
Protejamos a las vacas VSd_En el Goshala de Vrindavana 2007
VSd_Go-seva en el Gosala de Vrindavan (1980) con Jaganatha-Nrsimha dasa
VSd-Con las vacas de Vrindavana, Kartikka, 1993
VSd con las vacas del Bhaktivedanta Ashram, Govardhana_2008
VSd con las vacas de Gokula_2007
VSd en el Goshala de Vrindavana con mi amiguito Nandu del Gurukula
VSd_con las vacas del Bhaktivedanta Ashram, Govardhana, Diciembre 2008
Una fuente de agua en Manasi-ganga, Govardhana (Foto VSd_2008)
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