SRI
NRSIMHADEVA
SRI NRSIMHADEVA
Creado por juancas el martes, 15 de marzo de 2011 a la(s) 18:19
El néctar de Prabhupada (Serie de entregas)
CONTENIDO
NOTAS de Visuddha-sattva Das
Publicadas en el AÑO 2011- Srila Prabhupada dijo: “Krishna puede rechazarte”
- Srila Prabhupada-siksa
- Srila prabhupada dijo: Contra el impersonalismo y la adoración de los semidioses
- Lo que dijo Srila Prabhupada sobre los procesos de siddha-pranali, asta-kaliya-lila y raganuga-bhakti
- Continuación: ¿Qué es siddha-pranali?
- Continuación: ¿Qué dijo Prabhupada sobre el siddha-pranali?
- Lo que Srila Prabhupada no quería
- Srila Prabhupada dijo: Pasajes extraidos de la Biografía de Srila Prabhupada
- Srila Prabhupada sobre los sueños y las experiencias astrales
- El Néctar de Prabhupada (Octava entrega)
- El Néctar de Prabhupada (Una historia especial)
- El Néctar de Prabhupada (Séptima entrega)
- El Néctar de Prabhupada (Sexta entrega)
- El Néctar de Prabhupada (Quinta entrega)
- El Néctar de Prabhupada (Cuarta entrega)
- El Néctar de Prabhupada (Tercera entrega)
- El Néctar de Prabhupada (Segunda entrega)
- El Diario de Srila Prabhupada en el Jaladuta-1965
- Una carta de Srila Prabhupada a Srila Sridhara Maharaj
- Srila Prabhupada dijo: sobre la calificación de un brahmana
- Srila Prabhupada uvaca: El principio de yukta vairagya; toda riqueza y opulencia humana deben utilizarse en Krishna-seva
- Srila Prabhupada uvaca: ¿Quién es un devoto materialista o kanistha-adhikari?
- Srila Prabhupada y los profesores
- Los peligros de desviarse de las instrucciones del maestro espiritual: 3 cartas de Srila Prabhupada
- El significado del Vyasa-Puja de Srila Prabhupada
- Srila Prabhupada dijo
- Quien no sigue al guru tal como debe ser no puede ser considerado discípulo
- Pasatiempos de Srila Prabhupada: La primera edición del Bhagavad-gita
- Srila Prabhupada dijo (Bhag. 29 Sep. 1974)
- El néctar de Prabhupada (Serie de entregas)
- Srila Prabhupada uvaca: No hay dificutad para que Krishna nos dé un Guru
- Srila Prabhupada uvacha
- "La esencia de la prédica de la Conciencia de Krishna": Carta de Srila Prabhupada a R. Prakash (22 Junio 1951)
- Instrucciones de Srila Prabhupada...
- Memorias e instrucciones de Srila Prabhupada
- Prabhupada uvaca: ¿Quién es guru y cómo aceptar discípulos?
- Srila Prabhupada uvaca: Anavrttih sabdat—Liberación por medio del sonido
- La nefasta civilización moderna: citas de Srila Prabhupada
- Srila Prabhupada-lila… y un testimonio personal
- Srila Prabhupada uvaca: Sobre la vida sexual y su reflejo pervertido
- Visión y Plan Maestro para ISKCON Vrindavana (los verdaderos estándares de Srila Prabhupada)
- Visuddha-sattva Das - INDICE de NOTAS VAISHNAVAS
Srila Prabhupada
El néctar de Prabhupada
Después de que se publicó la biografía de Srila Prabhupada, titulada Srila Prabhupada-lilamrta, al autor comprendió que aén quedaba mucho néctar de Prabhupada diseminado en los corazones de los devotos que lo conocieron personalmente. Entonces tomó la feliz iniciativa de recolectarlo para el deleite de la comunidad vaisnava de todo el mundo. De alli surgieron cinco pequeños volúmenes que fueron publicados en ingles por The Gita-nagari Press con el título de Prabhupada Nectar, que comprende finalmente cinco libros.
Esos importantes testimonios de los devotos sobre sus experiencias personales con Srila Prabhupada, fueron luego bien traducidos al español y agrupados en un solo libro con el título El Néctar de Prabhupada, el cual fue publicado en 1966 por la Editorial Vaisnava Sanga, en Costa Rica, como una ofrenda en la conmemoración del Centenario de Srila Prabhupada (1896-1996).
Debido a que el néctar de los pasatiempos del Srila Prabhupada-lila está adquiriendo cada día más sabor y relevancia, este libro tan especial ha sido desde su aparición muy leído por todos los prabhupadanugas. Como bien explican los editores, este néctar tiene un carácter muy trascendental e ilustrativo para todos los seguidores de SU Divina Gracia, A.C.Bhaktivedanta Swami Prabhupada:
“Pocos libros resultan tan atractivos como las biografías de personas célebres, los diarios y las historias instructivas o los cuentos. Son libros mágicos que despiertan y recrean el espíritu soñador de los lectores. Los seres humanos somos muy sensibles a los estímulos que evoquen sentimientos iluminantes.
Indudablemente, todos los libros de Srila Prabhupada son ricos en contenido filosófico y sentimiento devocional. Sin embargo, más iluminante y atractivo que sus libros es su personalidad. Escucharlo dialogar con otras personas es sencillamente fascinante. Sus ingeniosas ocurrencias llenan de regocijo. Sus inteligentes analogías y su fino humor al contar historias deleitan y entusiasman. Srila Prabhupada conquistó y arrebató los corazones de quienes tuvieron la fortuna de conocerle y estar cerca de él, y lo sigue haciendo a través de las numerosas publicaciones literarias y audio-visuales surgidas en los años posteriores a su desaparición física de este mundo”.
Al leer las anécdotas y testimonios de los devotos recogidos en El Néctar de Prabhupada y al meditar en la personalidad de Srila Prabhupada, uno es trasportado al entorno de una personalidad trascendental muy querida a Krishna y a sus discípulos, porque como devoto puro de Krishna, Srila Prabhupada mostro en cada acto de sus pasatiempos manifestados las cualidades espirituales extraordinarias de un maha-bhagavata Vaisnava. Todo lo que Srila Prabhupada hizo y dijo durante su vida, estaba imbuido por esas cualidades divinas que son tan gloriosas y nectareas debido a que todas sus actividades trascendentales y su carácter ejemplar estaban profundamente conectadas con Krishna.
El néctar de Prabhupada no se agota en este libro. Queda aún mucho néctar diseminado en sus obras, cartas, significados, en las instrucciones y encuentros directos con sus discipulos y discípulas.
El compulador señala que al presentar las anécdotas, no se han alterado ninguno de los hechos, pero frecuentemente se han “redactado y pulido en una forma narrativa”. Debido a la hetereogénea variedad de los testimonos que fueron grabados para su posterior recopilación, se crearon categorías tales como “Prabhupada Dijo” (que consiste en citas directas sobre temas específicos), “Prabhupada cuenta una Historia” y “Personal”.
Para su mayor atractivo y rápida información al lector de la historia o testimonio implícito, en el cual se da el nombre del devoto o devota que refiere el incidente, en cada libro se han titulado las diferentes secciones, lo cual sirve también como alusión directa al pasatiempo o historia referida. Al final de cada uno de los cinco libros que comprende la edición final, hay notas que dan una referencia sobre la fuente del pasatiempo, con algunos comentarios adicionales añadidos por el compilador, Satsvarupa das Goswami. Las anécdotas son auténticas y bien confirmadas entre las grabaciones de Srila Prabhupada y los testigos confiables. Como expresa el compilador, el trabajo de recopilación fue del por si una valiosa experiencia, que anadió más néctar in vivo sobre la conciencia de Prabhupada:
“Aunque siempre nos sentimos más confiados al oír anécdotas de labios de discípulos más antiguos que son líderes y miembros activos del movimiento para la conciencia de Krishna, no excluimos de manera alguna el escuchar de otros discípulos, mientras éstos sean favorables y no sientan envidia de Srila Prabhupada. De hecho, el fenómeno de entrevistar a un devoto de Srila Prabhupada es en sí un notable testimonio para calibrar la autenticidad de los recuerdos de Srila Prabhupada. A veces los devotos lloran por primera vez en años, al experimentar fuertes emociones o incluso dolor por el recuerdo y por la separación de Prabhupada, y muchas veces nos agradecen más tarde por haberlos ayudado a recordar a Prabhupada. Cuando están absortos en tales entrevistas, parece como si la cobertura de los años de olvido hubiera sido retirada, al menos temporalmente, y el devoto obtiene una vez más la misericordia de la asociación con Prabhupada a través del recuerdo. Un entrevistador entrenado puede apreciar estos síntomas positivos, pero también aprende a detectar inconsistencias en el contexto cuando los recuerdos son inexactos.
Además, cada devoto parece tener su propio repertorio de historias sobre Prabhupada que tiende a recordar una y otra vez. Estas memorias fijas nos indican que ciertos recuerdos de Prabhupada están grabados permanentemente en los cerebros de los testigos. Aunque el mismo acontecimiento de la vida de Prabhupada es visto en una variedad de formas de una persona a otra, los recuerdos aún siguen siendo personales, intercambios duraderos entre Prabhupada y esas personas en particular, quienes inevitablemente recuerdan el acontecimiento en maneras particulares. Muchas de las historias de Prabhupada han entrado ya en una tradición oral, y son transmitidas de un oyente a otro en una sucesión discipular en la cual la fuente original no siempre puede ser recordada. Estas historias pueden también ser aceptadas -así como evaluadas en cuanto a su autenticidad se refiere- por personas familiarizadas con la vida y la filosofía de Srila Prabhupada. Así, aunque hemos dado referencias específicas para la fuente de cada incidente mencionado en este libro, usualmente estos incidentes no dependen sólo de una persona sino que son parte de una tradición colectiva. Aunque no podemos pretender que nuestro sistema de selección sea infalible, frecuentemente nos abstuvimos de contar un incidente aparentemente instructivo, porque tenía una débil autenticidad. Definitivamente estamos en contra de contar cualquier historia inventada acerca de Srila Prabhupada y hemos hecho lo mejor que pudimos para excluir las especulaciones”.
Aunque existen nuemerosas biografías de personajes notables de la historia, El Néctar de Prabhupada es único en importancia, debido a que nuestro maestro espiritual tenía el poder de entregar a todos amor puro por Krishna, la más alta ciencia trascendental basada en las enseñanzas del Señor Caitanya Mahaprabhu. Y Srila Prabhupada difundió ese néctar más exstensa y eficazmente que cualquiera de sus predecesores.
Prabhupada fundo y difundió su divina misión en Kali-yuga, la era de de riña e hipocresía, donde imepra la gran falta de fe y la degradación de los valores espirituales. Es por ello que si escuchamos o leemos aún los más pequeños incidentes en la vida de Srila Prabhuapda, eso será más beneficioso que escuchar los más grandes actos públicos y/o biografías de todos los héroes y benefactores mundiales.
Como se declara en las Escrituras védicas reveladas (sastras), hasta un solo momento de asociación con un vaisnava puro, puede liberarnos del ciclo de nacimiento y muerte. En el Srimad-Bhagavatam (1.18.13) se dice lo siguiente:
tulayama lavenapi
na svargam napunar bhavam
bhagavat sangi sangasya
martyanam kim utasisah
“El valor de tener por un momento la compañía del devoto del Señor, ni siquiera se puede comparar con el hecho de alcanzar los planetas celestiales ni con liberarse de la materia, y ni qué hablar de compararlo con bendiciones mundanas en la forma de prosperidad material, que son para aquellos que están destinados a morir”.
Dado que una simple gota de néctar de la vida de Srila Prabhupada puede salvarlo a uno del sufrimiento, todos los involucrados en difundir el néctar de Prabhupada, estamos tratando de entregar muchas gotas de ese néctar para irrigar este desértico mundo material y atraer a la conciencia de Krishna a todas las sinceras almas condicionadas.
Aunque la publicación de El néctar de Prabhupada es muy voluminosa, trataré de seleccionar y publicar aquí en estas notas de Facebook, algunos de los relevantes testimonios que allí se encuentran, para el placer de todos los lectores, esperando con ello que se acerquen a las obras de Srila Prabhupada para cultivar mejor la conciencia de Krishna.
____________Visuddha-sattva dasa
Del Libro Primero: Pasatiempos de Srila Prabhupada
3. Controlar la lengua es díficil
El sirviente de Srila Prabhupada estaba teniendo dificultades en controlar sus sentidos y le pidió a Prabhupada que le diera una dieta especial. Cuando corrió la noticia de que Prabhupada había recomendado una dieta, otro devoto se le acercó para un tratamiento similar.
—Prabhupada, ¿hay algo que yo pueda hacer para controlar la lengua? ¿Hay ciertas cosas que deba evitar, como el azúcar?
Prabhupada dijo: —El método para controlar la lengua es cantar y orar.
—Bueno —dijo el devoto—, yo estoy cantando y orando, pero aún tengo dificultad.
Prabhupada se recostó en su asiento y se rió.
—Sí, lo sé —asintió—. Yo también tengo lengua. Puede ser difícil, pero trata de comer lo más simplemente que puedas.
Srila Prabhupada continuó describiendo que en la segunda guerra mundial había habido un bombardeo en Calcuta, justo cuando él se disponía a honrar el prasada. Sus amigos habían venido corriendo a su casa para avisarle: —¡Abhay Babu, venga pronto! ¡Está sonando la alarma aérea! ¡Están cayendo las bombas!”—. Prabhupada les respondió diciendo que no podía ir porque su esposa acababa de preparar unos kachauris. Les dijo a sus amigos: —“Vayan al refugio. Yo me quedaré aquí”—.
Y así, ofreció los kacauris, los comió y cantó Hare Krsna.
Entrevista con Nanda kumara dasa
Prabhupada dijo que tenía lengua, pero no dijo que la tenía descontrolada. El siddhanta de la conciencia de Krsna es que la lengua debe ser utilizada en el servicio de Krsn: sevonmukhe hi jihvadau. Con los sentidos burdos uno no puede comprender a Krsna, Su nombre, Su forma, sino solamente cuando uno purifica su conciencia ocupándose en el proceso de bhakti-yoga, que comienza por la lengua. Prabhupada describe este principio superior de renunciación en El Néctar de la Devoción:
Srila Rupa Gosvami recomienda entonces que uno no debe estar apegado al goce de los sentidos materiales, sino que debe aceptar todo lo agradable que esté en relación con Krsna. Por ejemplo, comer es necesario, y uno quiere algunos platos sabrosos para satisfacer su sentido del gusto. Así, en ese caso, para la satisfacción de Krsna en lugar de la satisfacción de la lengua, se pueden preparar unos cuantos platos sabrosos y ofrecerlos a Krsna. Entonces esto es renunciación. Se pueden preparar platos agradables, pero a menos que sean ofrecidos a Krsna uno no debe aceptarlos para comer. Este gesto de rechazar cualquier cosa que no es ofrecida a Krsna es realmente renunciación. Y por tal renunciación uno es capaz de satisfacer las demandas de los sentidos. (El Néctar de la Devoción, cap. XIV, pág. 124)
4. ¿Y usted por qué tiene las piernas desnudas?
Una tarde en el Bhaktivedanta Manor (cerca de Londres), Srila Prabhupada estaba sentado en su cuarto con sus discípulos y unos cuantos invitados, incluyendo a una reportera que había venido para entrevistar a Srila Prabhupada. A pesar de la fresca temperatura del verano inglés, la reportera estaba vestida con una escasa minifalda. Sus primeras pocas preguntas revelaban una actitud escéptica y un tanto cínica hacia el movimiento Hare Krsna. Como de costumbre, Srila Prabhupada contestó de una manera muy experta y serena. Exasperada en cierta forma y de un modo desafiante, ella sacó a colación la vieja pregunta:
—¿Por qué se rapan?
Srila Prabhupada replicó inmediatamente: —¿Y usted por qué tiene las piernas desnudas?
Ella quedó desconcertada. Entonces Prabhupada propuso:
—Es mejor tener las piernas calientes y una cabeza fresca.
Todo el mundo, incluyendo la reportera, se rieron con deleite.
Prabhupada añadió: —Para comprender esta filosofía de conciencia de Krsna uno debe tener la cabeza fresca.
Entrevista con Yaduvara dasa
5. ¿Cómo la luna da sabor a los vegetales?
Durante una caminata matutina en Vrndavana, los devotos estaban preguntando a Srila Prabhupada acerca de la Luna. Un pálido borde de la Luna aún podía verse en el cielo, y varios pájaros estaban piando desde los árboles. Prabhupada dijo: —La Luna está brillando y por lo tanto tiene calor, y sin embargo su efecto sobre la Tierra es refrescante.
Visakha-devi dasi era una de las pocas devotas que acompañaban regularmente a Srila Prabhupada en sus caminatas, por su profesión de fotógrafa. En esta ocasión, ella dejó de tomar fotografías y caminó más de cerca, para hacer una pregunta a Prabhupada acerca de este tema.
—Prabhupada, en un significado del Bhagavad-gita dice que los vegetales tienen sabor gracias a la luz de la Luna. Pero ¿cómo hace la Luna para darle sabor a los vegetales?
Prabhupada dejó de caminar para considerar su pregunta. Su comportamiento era maduro y suave, pero su mirada penetraba hacia el interior de sus ojos.
—¿Por qué no se lo preguntas a ella?
Esa fue su única respuesta, y continuó caminando.
Entrevista con Visakha-devi dasi
La respuesta de Srila Prabhupada fue inesperada. Otra manera experta de enseñar. Una vez cuando un discípulo solicitó demasiada información detallada acerca de la naturaleza del mundo espiritual, Srila Prabhupada respondió que «cuando de hecho vayas al mundo espiritual, entonces podrás ver por ti mismo estas cosas». Cuando un devoto le preguntó por qué el Señor Siva apareció como Sankaracarya, Prabhupada contestó: —No tienes ningún derecho a cuestionar las actividades del Señor Siva—. De esta manera Prabhupada detectaba y corregía una mentalidad dudosa en el interrogador. Así como la cascada a veces fluye y a veces no, así el devoto puro a veces puede hablar y otras enmudecer o dar una contestación enigmática. En todos los casos aprendemos de él.
Srila Prabhupada dijo:
6. Sobre el prasada
Respecto al prasada, los remanentes siempre deben ser comidos si no se han echado a perder o si no han sido tocados por una persona enferma. Nunca debemos desperdiciar el prasada de Krishna; lo mejor es cocinar sólo lo que se requiere y luego dar a cada persona lo que ella quiere. Ese es el sistema védico, que la gente se siente en filas detrás de sus platos y que los que sirven pasen por las filas y pongan en cada plato una muy pequeña porción de alimento, a menos que haya alguna objeción de parte de alguna persona, en cuyo caso no se le da de ese alimento. Luego, si alguien desea más, los que sirven pasan continuamente de arriba a abajo por las filas y dan más a quien lo solicite. De esta manera no se desperdicia nada y cada uno queda satisfecho.
Carta a Kirtiraja dasa (27 noviembre 1971)
En la India, Prabhupada instruía a los devotos acerca de cómo debe comer un caballero y cómo alimentar a los invitados que vienen al templo. Durante las comidas el anfitrión debe estar muy atento a las necesidades de su invitado, suministrándole porciones de puris calientes, agua fresca y más de cada preparación. Debe también ocupar a su invitado en una conversación ligera y relajante, y no en temas pesados que produzcan ansiedad.
Entrevista con Jayapataka Swami
Prabhupada decía que el arroz era inútil a menos que fuera servido caliente. También decía que nunca debía ser recalentado, ya que causa un efecto venenoso.
Entrevista con Palika-devi dasi
En lo que se refiere a ofrecer sidra de manzana a Krishna, esto sólo se puede hacer si está preparada por los devotos. Los fabricantes de alimentos no toman las debidas precauciones en la limpieza, ni tienen tampoco devoción por Krishna en sus labores, por lo que no puede ser una ofrenda aceptable. Si puedes hacerla tú misma, entonces estará bien.
Carta a Rukmini-devi dasi (19 diciembre 1968)
8. Personal: la altura de Prabhupada
Su altura era aproximadamente de un 1,64 m. Un no devoto hubiese dicho «un hombre pequeño». La mayoría de sus discípulos eran más altos que él. Pero ninguno pensaba que era un hombre pequeño. Cuando veíamos a los periodistas describirlo como un hombre pequeño, para nosotros eso no tenía sentido. Era obviamente la visión defectuosa del no devoto. (Su sirviente dijo una vez: —Para alguien que supuestamente es pequeño, requieres de toda tu energía para cubrirle la espalda al masajearlo. ¡No lo puedes entender!). Sus zapatos eran de tamaño 8, la talla de su suéter alrededor de 36. Las palmas de sus manos eran suaves, de gesto audaz, las líneas de la vida largas y firmes.
Un sentimiento de protección emanaba de sus discípulos debido a que la altura de Prabhupada era más corta. Queríamos estar seguros de protegerlo porque era tan grande, tan valioso, nuestro maestro espiritual. En compañía de los karmis o de los devotos era regio al caminar con su bastón, de ninguna manera lo hacía como un hombre «pequeño» o «anciano». Sin pensar en su estatura física, cualquier persona se acercaba a Prabhupada respetuosamente, sometiéndose a él. Prabhupada era un caballero, y era tratado casi siempre en esa forma, muy respetuosamente. Dado que al hablar era muy refinado y correcto, él mismo proclamaba su misión con cada una de sus acciones, y la gente podía ver eso por sí misma.
Sus discípulos occidentales, quienes veneraban a Prabhupada, lo estaban acompañando casi siempre; eso era también imponente. Él no estaba solo, sino con sus sirvientes; si se veía pequeño, no obstante controlaba a otros que eran altos; por lo tanto, él era más alto que ellos. Tenía fuerza; decía que su mente era fuerte. Su rostro no era pequeño, tampoco lo eran su nariz aristocrática y su ancha boca; sus ojos eran muy grandes. Una vez más, estos contradecían la idea de «hombre pequeño». Era un santo, un sadhu, no «pequeño». No se sentaba como alguien pequeño. Su voz era profunda, podía ser áspera, fuerte, autoritaria, no pequeña. Su control sobre hombres grandes como Brahmananda, Jayapataka, Bhavananda, era completo. Su palabra, la manera en que levantaba las cejas, o el movimiento de su boca podían humillarlos completamente o impulsarlos a correr hacia la acción. Y escribió tantos libros. Él no era pequeño. Pero si así lo quería podía ser como un niño y uno tenía que ocuparse de él por completo: ese era su amor.
Satsvarupa dasa Goswami
9. Gesto confidencial
En la India, Srila Prabhupada era frecuentemente invitado para asistir a programas en las casas de las personas. A veces estas personas eran muy piadosas y se convertían en devotos por el contacto con Srila Prabhupada. En algunos casos ellos querían principalmente bendiciones materiales, salud y prosperidad, a cambio de hospedar a un sadhu y a sus seguidores. En una ocasión Srila Prabhupada, junto con veinte de sus devotos, estaba sentado en la sala de un hindú mientras el hombre presentaba a cada miembro de su familia.
—Esta es mi esposa —dijo el hombre, y la esposa se adelantó, inclinándose ligeramente y uniendo sus palmas en señal de reverencia. —Este es mi hijo mayor, esta es mi hija y este es mi hijo menor—. Cada uno se adelantó, dijo su nombre, mientras Prabhupada asentía afablemente. —Este es el esposo de mi hija —continuó el hombre—, y estos son sus hijos—. Cada grupo apareció y salió rápidamente. Finalmente, todos los miembros habían sido presentados y se habían marchado, dejando momentáneamente a Srila Prabhupada solo en la habitación con sus devotos. Con un gesto confidencial, Prabhupada en voz baja les dijo a sus discípulos:
—Esta es mi vida sexual.
Entrevista con Daivisakti-devi dasi
10. El éxtasis de Prabhupada
Srila Prabhupada dijo en una ocasión que cada vez que uno de sus manuscritos era impreso y publicado como libro, él sentía como si acabara de conquistar un imperio. Y así para sus discípulos era también una oportunidad de asociación íntima el poder preparar sus libros para imprimirlos y traerle por adelantado una copia recién salida de la imprenta.
Cuando se publicó la segunda parte del Séptimo Canto del Srimad-Bhagavatam, Srila Prabhupdaa estaba hospedado en el templo de ISKCON de la ciudad de Nueva York. Ramesvara Swami y Radhavallabha habían ido al aeropuerto y habían recibido las dos primeras copias por flete especial. Eran cerca de las 2 de la mañana cuando regresaron al templo. Deseosos de presentar el libro a Prabhupda, tomaron el ascensor hasta su habitación en el piso once. Había luz en la sala de estar. Abriendo silenciosamente la puerta, descubrieron que él no estaba ahí. Se dirigieron de nuevo al vestíbulo y vieron la luz encendida en el cuarto de baño. Con regocijo infantil, controlando apenas sus risas, cada uno escondió un libro detrás de su espalda y, sonriendo, esperaron para presentárselo a Prabhupada. Cuando Prabhupada salió, los vio y dijo: —Oh, ¿están aquí?—. Notó que estaban sosteniendo algo detrás de sus espaladas y que estaban tratando de controlar sus sonrisas.
—¿Tienen algo para mí? —dijo, correspondiendo perfectamente al humor de sus devotos. Entonces caminó hacia la sala de estar, miró sobre su hombro de manera juguetona y los invitó:
—¡Vengan!
Cuando le mostraron los libros, Srila Prabhupada exclamó: —¡Aaah!—, tomó uno de inmediato, y tocó su cabeza con él. Miró la cubierta y luego dio vuelta al libro y miró la cobertura de atrás. Abrió la primera página y leyó en voz alta el epígrafe seleccionado. Examinó detenidamente la introducción, página por página y luego miró cuidadosamente todas las láminas. Entonces Srila Prabhupada empezó a leer el libro en voz alta, desde el capítulo «Prahlada apacigua al Señor Nrsimhadeva con oraciones». La jubilosa fiesta de presentación se unió al éxtasis de una lectura del Bhagavatam por Srila Prabhupada. Continuó leyendo durante cerca de cuarenta minutos, aparentemente inconsciente de todo lo demás.
Entrevista con Ramesvara Swami
11. Srila Prabhupada y las medicinas
Había muchos inconvenientes a los que Prabhupada debía hacer frente debido a su edad avanzada y a las enfermedades, pero nunca fue afectado en su pura conciencia de Krsna. Incluso externamente, con frecuencia rehusaba a ceder a los dictados de sus males, diagnosticados como diabetes, mala digestión y muchos otros. Él o sus seguidores hacían venir doctores, pero él rara vez tomaba sus recetas o seguía sus regímenes alimenticios. No era lo que se puede llamar un buen paciente.
Cuando se encontraba en Nueva York un médico alópata de la India lo visitó y le dejó sobre el escritorio medicinas y antibióticos; Prabhupada fue cortés y agradable. Pero su sirviente Hari-sauri estaba dudoso.
—¿De verdad va a tomar esas medicinas? —le preguntó.
Prabhupda dio unas palmaditas sobre las pastillas y dijo, sin comprometerse: —Ya veremos—. Pero nunca las tomó. Los devotos empezaron a pensar que Srila Prabhupada consultaba a los médicos sólo para comprometerlos en servicio devocional.
Se rebelaba contra las severidades en su dieta, aun cuando estaba bastante enfermo. En la India, unkaviraja (médico ayurvédico) instruyó que Prabhupada no podía comer arroz, papas, azúcar y ciertas frutas. Cuando Prabhupada llamó a su cocinera en Vrndavana, Daivisakti-devi dasi, y le pidió que hiciese punjab boli, (un sabji picante de papas) ella le recordó respetuosamente: —Pero Prabhupada, usted no puede comer papas—. Prabhupda lo soportó por varios días y luego echó abajo la orden. Exigió su antigua comida de arroz, dal, capatis y sabji. En esa ocasión otro de sus bien intencionados sirvientes, Upendra, intervino: —Prabhupada, el doctor prescribió que no comiera todas estas cosas. Se va a enfermar.
Prabhupada contestó: —No somos doctor-dasa sino Krsna-dasa—. Así que a partir de entonces reanudó su dieta normal.
En Mayapura, su cocinera Palika-devi dasi intentó una disciplina aun más estricta, basada en las instrucciones de un famoso kaviraja de Calcuta. En este caso, Prabhupada debía seguir un horario complicado por el cual tomaría pastillas, comería y bebería sólo a ciertas horas. Eso fue en el año 1977, cuando Prabhupada estaba tan enfermo que rara vez bajaba al templo para dar clases, ni para una caminata matutina. Una tarde, Anakadundubhi dasa —desconociendo el ajustado horario de Prabhupada para comer y beber— le trajo, como de costumbre, un dob (agua de coco) para beber. A pesar de que Prabhupada sabía muy bien que no debía tomar nada a esa hora, aceptó el dob calmadamente y lo vació en su taza. Pero justo cuando empezaba a beberlo, Palika llegó y lo amonestó: Srila Prabhupada, usted no debía tomar nada...
Prabhupada se volvió desafiante: —¿Quién lo dijo?—, e inmediatamente se tomó toda la taza de jugo, aunque normalmente su costumbre era sorberlo lentamente. Y exclamó:—¡Toda mi vida he hecho lo que he querido!
Entrevistas con Daivisakti-devi dasi,
Radhavallabha dasa y Anakadundubhi dasa
__________(Continuará)
Srila Prabhupada escribiendo en su escritorio.
Srila Prabhupada en una excavación de una constucción.
Srila Prabhupada en una reunión con varios devotos.
Srila Prabhupada en Mayapur con un grupo de devotos. Bhavananda Goswami con el brazo el alto.
Srila Prabhupada en el estudio de grabación de Los Angeles.
Una foto extraordinaria de Srila Prabhupada.
Srila Prabhupada visitando una cocina con Karandhana y Srutakirti.
Srila Prabhupada en su escritorio, estirando su pie para que recibamos su misericordioso darshan.
Srila Prabhupada con la cabeza erguida en una caminata en India.
Srila Prabhupada. Probablemente sea en la ocasión que visitó en India a Lalita prasada Thakur, el hijo de Bhaktivinoda Thakur.
Candrika Devi Dasi
Prabhuinfinitamente mil gracias por darnos a conocer todo ese conocimiento, me quedo impresionada de toda la informaciòn que publica diariamente. Que servicio tan excelso dar a conocer a los devotos en profundidad nuestra religion. Hare Krishna.
24 de marzo de 2011 a la(s) 3:15
24 de marzo de 2011 a la(s) 3:15
Visuddha-sattva Das
Muchas gracias por su asiduidad y profundidad en las lecturas madre. Sólo trato de ayudar en mi humilde capacidad, porque creo que uno no debe ser avaro con el néctar que debe ser disribuidos a todos los sedientos de amor por Krishna.
24 de marzo de 2011 a la(s) 22:22
Visuddha-sattva Das
Apenas estoy asomando las puntas de iceberg que flotan en el océano del néctar, donde hay una insondable profundidad, donde circulan grandes tiburones....nuestros Vaisnava-acharyas, como explica Prabhupada en EL Nectar de la devoción. Uno es como un cartero que anda recogiendo las gotas de néctar que caen de los labios de los grandes maha-bhagavatas. Esos rasikas-achryas moran en las profundidades del océano de la devoción, y cuando salen a la superficie mostrando sus visiones, uno las va recogiendo por aquí y por allá, para difundir ese néctar entre todos aquellas almas que están siempre ansiosas por el. Pídale a Radha Rani para que pueda siempre ocuparnos en esa tarea trascendental.
24 de marzo de 2011 a la(s) 22:31
24 de marzo de 2011 a la(s) 22:31

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