Recuento biográfico de Siddha Krishna dasa babaji de Govardhana
24 de noviembre de 2014 a las 17:57
Recopilación y traducción de Visuddha-sattva dasa
—Bhaktivedanta Institute—
* * *
Como prometí en la nota anterior, donde se describió el
parampara de Srila Jaganatha das babaji, doy aquí un resumen biográfico de la extraordinaria personalidad del famoso Siddha Krishna dasa baba de Govardhana, al que estamos conectados en la línea
bhagavata-siksa-bhajana-parampara, ya que Jaganatha das babaji (acharya que figura en los altares de ISKCON en la sucesión discipular) fue discípulo de Srila Madhusudhana das babaji, quien fue discípulo de Sridha Krishna das baba de Govardhana, cuyo
siksa-guru en
bhajana fue Srila Vaisnava-charana dasa babaji Maharaj.
Siddha Krishna dasa baba de Govardhana escribió importantes libros sobre la práctica del servicio devocional avanzado, con su propio método de
raganugha-
bhajana llamado
Gutika, sobre la meditación en el
asta-kaliya-lila, lo cual se explicará más adelante. También conocido como Sri Siddha Krishnadasa Tatapada, él fue el autor de la importante antología
Bhavanasara-samgraha, una colección de meditaciones finales sobre los pasatiempos diarios de Radha-Krishna. Esta hermosa obra de 3.091
slokas es una recopilación de más de 34 obras del
rasa-sastra sobre el
asta-kaliya-lila de Radha-Govinda, como
Sri Govinda-lilamrta, Krishna-bhavanamrta, Krishnanika-kaumudi, etcétera.
Ocasionalmente, puso en el texto unos cuantos versos compuestos por él para conectarlos naturalmente con los otros. El reunió conjuntamente este vasto número de
slokas para formar un
smarana-padhati (un método recordatorio) de los pasatiempos diarios de la divina pareja de Vraja-
dhama. El último verso del libro revela que fue terminado en el mes de Phalguna en 1878 Sambat, que corresponde al año 1822. En la introducción de la edición inglesa traducida por Bhanu Swami y publicada en el 2006 por mi querido amigo Mahanidhi Swami, hay una breve biografía de Sri Siddha Krishnadasa Tatapada, quien residió en Govardhana (Sri Govardhana-nivasi) y es también conocido como Siddha baba de Govardhana. En el Cap. 4 del libro
The Saints of Vraja, del Dr. O.B.L. Kapoor (Adikeshava das), discípulo de Srila Bhaktisiddhanta Sarasvati, también fue publicada un reseña biográfica sobre esta extraordinaria personalidad Vaisnava.
Nació alrededor del año 1800 en Damodarapura, del distrito Mayurabhanga de Orissa, en una próspera familia y su nombre era Bat Krishna Kanango. Cuando tenía doce años, su madre le pidió antes de morir en la pira funeraria de su esposo que fuera a Vraja y se volviera un Vaisnava puro. Después que terminó su primera educación a los dieciséis años se fue a Vrindavan a pie, donde estudió sánscrito por dos años. El recibió
siksa-bhajana de Vaisnava-charana dasa de Brahma-kunda, quien escribió el
Pada Kalpa-taru. Cuando Krishna das visitó Jaipur para recibir el
darshan de Sri Govindaji, la famosa deidad de Srila Rupa Goswami quedó fascinado por la forma de la deidad y le pidió al Rey de Jaipur que le permitiera servir a Govinda deva a través de
astakalina-seva, los ocho períodos del día y la noche. El Rajput accedió y puso a Krishnadas como portero del templo, donde también fue
pujari. Así sirvió por muchos años allí y luego regresó a Vraja, donde se quedó en el bosque Domana ocupado en
bhajana.
Ocasionalmente, caminaba hasta las cercanías de Nandagrama para mendigar un poco de harina blanca, que solía mezclar con agua y comer eso crudo. A veces comía gruesos
chapatis mezclados con hojas de
neem. Gradualmente, su cuerpo se volvió tan delgado y se debilitó tanto que no podía mendigar alimentos y comenzó a perder la visión. Se quedó sobreviviendo en el bosque con un poco de agua de un lago, hasta que paró de beber. Conociendo su deplorable condición, Srimati Radharani se llenó de compasión al ver que Krishadas había pasado dos o tres días sin beber agua. Tomando la mano de Lalita sakhi, Radharani le dijo: “¿Quieres deshonrar mi nombre? ¿Por qué no muestras tu favor a Krishna dasa? Toma este plato de
prasada y llévaselo inmediatamente”.
Lalita le llevó el
prasada a Krishnadasa diciéndole: “¡Baba! Por favor, honra este
prasada. Viendo tu condición sufriente mi madre lo ha enviado para ti”.
Las palabras de Lalita actuaron como un elixir para revivir al moribundo Krishna dasa. Tan sólo la divina fragancia del
prasada le dio la fuerza para sentarse. Cada célula de su cuerpo se sobrecargó con energía sobrenatural al probar la sagrada comida.
Lalita, quien estaba vestida como una joven
gopi, le preguntó: “¡Krishna dasa! ¿Por qué no vas al pueblo a pedir alimento?”
Krishna das le respondió: “Yo estoy ciego, ¿cómo puedo ir a cualquier parte?”
Lalita dijo: “¿Si pudieras ver irías para hacer
madhukari?”
Krishna das asintió: “Sí, ¿por qué no?
Lalita le dijo: “Mi madre me dio un bálsamo. Después que te aplique el ungüento en tus ojos, debes mantener los ojos cerrados al menos durante una hora. Entonces tus ojos se sentirán mejor”.
Lalita untó el bálsamo en el ojo derecho de Krishna dasa. ¡Tan pronto como ella tocó su ojo izquierdo, Baba abrió sus ojos y pudo ver! Aunque se le había dicho que no abriera los ojos, lo hizo para saber quién estaba allí. Pero no había nadie y el plato de
prasada se había desvanecido misteriosamente. Sin embargo, un increíble aroma celestial quedó flotando en el aire. Él se quedó allí tres días tratando de entender qué había pasado.
Después de tres días, apareció una tarde ante Krishna dasa una divina dama, con un cuerpo más refulgente que millones de lámparas, y le dijo: “¿Por qué estas ansioso y te sientes triste? Tú eres mío y Yo soy tuya. Por el toque mágico de la gentil mano de Lalita, que no es diferente de Mí, tú no solo has recobrado tu vista, sino que con su toque ella te ha dado todo poder y también has recibido todas mis bendiciones. Abandona ahora todas tus preocupaciones; ve a Govardhana y aprende de los Vaisnavas que están allí firmemente dedicados el método natural (
paddhati) para obtener mis pies de loto”.
Después de haberle dado esta orden, la divina dama, cuyo nombre no era otro que Srimati Radhika, desapareció. Krishna dasa quedó inerte por largo tiempo y las ocho transformaciones extáticas (
sattvika vihara) se manifestaron en su cuerpo. El consideró su vida completamente exitosa por haber tenido el
darshan de Radharani y por recibir su orden se sobrecogió con Krishna-prema. Fue a Govardhana y completó su entrenamiento. Después se situó en Chakalesvara (Chakresvara), en las riberas de Manasi-ganga, cerca del
bhajana-kutir de Sanatana Goswami, donde pasó el resto de su vida ocupado intensamente en
bhajana.
Krishna dasa comenzó a estudiar cuidadosamente sánscrito con algunos Vaisnavas mayores para entender los escritos esotéricos de los Goswamis. Sin embargo, se encontró con un obstáculo porque sus estudios del
Sri Harinamarta-vyakarana impedían su
bhajanay viceversa. Pensando que no había solución, una noche de gran ansiedad decidió ahogarse en las aguas de Manasi-ganga. Sri Sanatana Goswami y Sri Lalita-sakhi aparecieron ante el
bhajana-kutira de Krishna dasa y lo llamaron para que saliera. Entonces vio a Sanatana Goswami con un manto sobre sus hombros y un pote en su mano, acompañado por una joven de celestial encanto, que no era otra que Lalita-devi. No sabiendo qué hacer, babaji maharaj se postró a Sus pies de loto.
Sri Sanatana Prabhu puso su mano sobre la cabeza de Krishna dasa y le dijo compasivamente: “!Mira Krishna dasa! ¿Estás consiguiendo suficiente comida para llenar tu estómago?”
Con la voz chocada por la emoción y sus ojos llenos de lágrimas, él respondió: “¡Sí, prabhu!”.
Sri Sanatana le dijo misericordiosamente a Krishna dasa: “Por favor, trata de entender que las escrituras son insondables. Uno solo puede entrar en ese reino infinito por el poder de su calificación. ¿Por qué quieres acabar con tu vida? ¡No contemples tan dañino consejo dentro de tu mente! Tú debes publicar muchos libros para la misión de Sri Chaitanya Mahaprabhu. Por mi bendición el significado interno de todas las
sastras se manifestará en el fondo de tu corazón”.
Sri Lalita-devi le dijo: “Ahora debes describir el proceso de
bhajana para el beneficio de los Vaisnavas que residen en Vraja. Por nuestra misericordia todas las
sastras te serán espontáneamente reveladas. No tiene sentido que te mates. En tu cuerpo será realizado un gran trabajo”. Entonces, ambos lo bendijeron poniendo Sus pies de loto sobre su cabeza y se desvanecieron.
Krishna dasa babaji se sumergió en
raganuga-bhajana ocupándose en
sravanam-kirtanam. A veces, se paralizaba cuando cantaba el Santo Nombre y torrentes de lágrimas fluían de sus ojos. Estaba totalmente inmerso en su
bhajan personal, pero siempre deseaba ayudar bondadosamente cualquier persona sincera que le preguntara acerca de las intrincada adoración interna de Radha-Govinda.
Krishnadasa comenzó a recolectar y saborear todo lo que podía encontrar en los libros de los Goswamis que pudiera realzar su
bhajana, quedando profundamente absorto en
raganuga-bhajana casi todo el tiempo.
Su extraordinaria inmersión en
prema-rasa se manifestaba obviamente cuando estaba ocupado en
sravanam-kirtanam. Durante su
lila-sravana-kirtana, fluían de su rostro lágrimas, mucosas y saliva, y ese indetenible flujo era atendido por dos Vaisnavas. Una vez, cuando estaba sentado en la ribera de Manasi-ganga en profundo trance, cayó en las aguas y permaneció allí durante tres días, flotando en la superficie al cuarto día. Se dice que apareció así sosteniendo varios libros que habían sido escritos a mano por Srila Visvanatha Chakravarti Thakur, los cuales no habían sido tocados por el agua. Es sabido que cuando estaba escribiendo esos libros, Visvanatha Chakravarti Thakur estaba sentado en un sitio cubierto durante la estación lluviosa y que no los tocó ni una gota de agua.
Cuando sus seguidores encontraron flotando a Krishna dasa babaji, lo sacaron de allí y vieron que aún vivía. Después que cantaron fuertemente
nama-kirtana por largo tiempo, él regresó finalmente a su conciencia externa. Desde ese momento fue conocido como “Siddha baba” y los Vaisnavas de Vraja iban frecuentemente a verlo para conocer acerca de todos los aspectos del
bhajana.
Siddha Krishna dasa babaji estudió muchas obras y escribió varios libros, incluyendo el mencionado
Bhavanasara-sangraha, Pratharmrta-tarangini, Sadhanamrta-chandrika y
Gaura-govinda-archana-paddhati, y otros libros. Después de estudiar y deliberar a fondo obras como el
Govinda-lilamrta de Srila Krishnada Kaviraj Goswami,
Sri Krishna-bhavanamrta,
Sankalpa-kalpa-druma y
Ksanada-gita-chintamani de Visvanatha Chakravarti Thakur,
Padamrta-samudra de Radhamohana Thakur (el tataranieto de Srinivasa-acharya), el
Pada-kalpa-taru y otros libros, Siddha Krishnadas baba compuso su
Padhati (manual), describiendo el proceso de ejecutar
smarana interno tanto de
sri-chaitanya-lila como de
sri-radha-govinda-lila, y comenzó a enseñarlo a sus discípulos.
Cada noche les preguntaba cómo iba su meditación en ese tipo servicio devocional, y si había algún error u omisiones, el los corregía y ajustaba sus prácticas. Ese método de
bhajana-paddhati fue conocido como
gutika, que significa una piel de cualquier fruto en su primer estado de crecimiento. Uno de sus seguidores, también conocido como Krishnadasa, expandió el libro y lo distribuyó ampliamente entre la comunidad Vaisnava. Aunque Siddha Krishna dasa baba fue el autor de todos esos libros, fue el segundo Krishnadasa quien los difundió ampliamente. Incluso un tercer Krishnadasa (Lala Babu), escribió un libro titulado
Nandisvara-chandrika.
Una tarde, uno de sus estudiantes estaba sentado llorando en la asamblea. Babaji maharaj le preguntó que le pasaba. El estudiante le respondió: “Hoy no puedo hacer ningún
bhajana interno (
manasi-seva). Esta mañana en mi meditación traté de fijar un brazalete en la mano izquierda de Sri Pranesvari [Radharani]. Mi mente quedo entrampada por la belleza de la mano de Radhika y, encerrada en esa visión, no pude pensar en ninguna otra cosa todo el día”.
Satisfecho con su revelación, Siddha Krishna dasa baba respondió: “Tu
bhajana está yendo muy bien. Ese es el verdadero
bhajana”. A quien Siddha baba instruía en
bhajanatambién se volvía perfecto. Cuando los servicios trascendentales ejecutados en el
bhava-deha (cuerpo espiritual) se manifiestan a veces en el cuerpo físico y son percibidos por otros, entonces al devoto se le llama un
siddha en
bhajana, es decir, que ha alcanzado la perfección en su servicio trascendental.
Bhava-deha o
siddha-deva es el cuerpo sutil interno espiritualizado, a través del cual el Vaisnava sirve a Radha-Madhava estando ocupado en la meditación o visualización de Sus eternos pasatiempos trascendentales.
Un día, mientras Siddha Krishna dasa estaba meditando en su
manjari-svarupa (
siddha-deha), contemplando el
holi-lila (el festival de primavera dedicado a Krishna y las
gopis que se celebra lanzando polvo rojo con agua en jeringas y explosiones fulgurantes, durante los diez días anteriores a Phalguna purnima), él estaba ayudando a Radharani a arrojar colores sobre Syama durante el pasatiempo, sin que nadie viera cuando estaba en trance. Cuando babaji maharaj regresó a su conciencia externa y salió de su
bhajan-kutira, vio que su cuerpo físico estaba cubierto con
avir (polvo rojo perfumado),
karpura (alcanfor), y
chandan (pasta de sándalo), que habían sido arrojados en el trascendental
holi-lila. Todos los Vaisnavas quedaron asombrados al ver esas substancias trascendentales sobre su cuerpo.
En otra ocasión, Radha-Madhava estaban disfrutando en las aguas de Manasi-Ganga. Lalita y Visakha vinieron luego para vestirlos y adornarlos con los artículos que habían sido recolectados por Rupa Manjari y otras
sakhis y
mañjaris. Siddha Krishna das estaba entre ellas en su
mañjari-svarupa, sosteniendo un frasco de aceite perfumado para serle ofrecido a Radha-Madhava en el momento apropiado. Repentinamente, babaji maharaj quedo paralizado y hechizado al ver a la Divina Pareja riendo y disfrutando, y se le cayó el frasco de aceite, que perfumó el área por todas partes., difundiendo la dulce fragancia.
Los Vaisnavas que habían ido a bañarse a Manasi-ganga olieron la divina fragancia y le preguntaron a Siddha baba que había pasado. Sintiéndose un ofensor, les respondió agachando su cabeza avergonzado: “¿Qué puedo hacer queridos hermanos? Yo soy un
pasandi [ofensor], incapaz de servir a Priyaji. Debido a mi ignorancia, cuando estaba esperando servir a Priya Priyatama, quedé paralizado en éxtasis y se me cayó el aceite perfumado que estaba destinado para complacerlos en mi
seva. Esta es la divina fragancia que ustedes perciben”.
Así han sido relatadas estas y otras historias de los pasatiempos trascendentales de Siddha Krishna dasa baba. Lala Babu fue un día a verlo para aceptar
babaji vesa (la vestimenta de un
paramahamsa) y Siddha-Krishna dasa le dijo: “Tu eres un gran disfrutador. Durante un año debes alimentar con trigo a algunas vacas y comer solo lo que queda en su excremento”. Lal Babu hizo eso y alcanzó el favor de Siddha baba.
Siddha Krishna das baba desapareció de este mundo el cuarto día de la quincena brillante (
gaura-paksa), en el mes de Asvini (Septiembre-Octubre). Su
samadhi se encuentra en Manasi-Ganga. No se conoce su identidad espiritual, al menos por quienes no fueron sus íntimos asociados en Govardhana.
En el siguiente enlace hay tres video-clips sobre los kirtans de un festival celebrado en honor de Siddha Krishna das baba de Govardhana en el 2005 subidos al Website por Lake of Flowers Productions:
http://news.vrindavantoday.org/2011/10/siddha-krishnadas-babas-utsava/#foobox-1/0/Manasaganga.jpg
Vaisnava dasanudasa
Visuddha-sattva dasa
(Bhaktivedanta Institute)
OM TAT SAT
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